Aproximadamente 17 infracciones diarias son aplicadas a conductores por circular con autos que contaminan el medio ambiente, esto tras ser detenidos por las patrullas ambientales, informó el secretario de Seguridad Ciudadana, Juan Marcos Granados Torres.
Puntualizó que las multas por no tener un vehículo adecuadamente afinado y que contamine oscila en los 20 UMA, es decir, alrededor de 600 pesos.
El funcionario estatal refirió que cuentan con tres patrullas ambientales que proporcionó la Secretaría de Desarrollo Sustentable (Sedesu), las cuales cuentan con el aparato que sirve para medir el nivel de contaminación.
Además de los recorridos que hacen las patrullas, dijo, se hacen operativos ambientales en los lugares donde mayor incidencia de contaminación existe.
“De acuerdo con información que presentó Sedesu, son las zonas donde hay mayor concentración de vehículos, y depende de la concentración de los factores contaminantes, es ahí donde estamos haciendo los operativos “, señaló.
Puntualizó que la mayoría de los operativos se hacen en la zona norponiente y por la delegación Felipe Carrillo Puerto.
Aseguró que la operatividad ha sido suficiente, además los policías tienen la instrucción de que cuando ubiquen un vehículo contaminando soliciten la medición, y de acuerdo a los resultados se determina si son acreedores a infracción o no.
Granados Torres señaló que en los primeros 20 días los operativos eran piloto, pero ahora ya están trabajando adecuadamente.
Para las tres unidades el gobierno del estado aplica una inversión de casi 3 millones de pesos, las cuales iniciaron actividades a principios de este año.
Los vehículos se adquirieron como parte de las acciones que el gobierno emprendió luego de su incorporación a la Comisión Ambiental de la Megalópolis (Came).
Para que la ciudadanía evite este tipo de infracciones tiene que llevar a cabo las verificaciones de sus vehículos en los 42 verificentros que hay en el estado.
El esquema de verificación vehicular está normado por la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa) y la Entidad Mexicana de Acreditación, para que el estado cumpla con la norma oficial y el Instituto de Ecología y Cambio Climático.