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Durante la temporada invernal se presenta con mayor frecuencia el ojo seco, por la menor humedad en el ambiente y el uso de calefacciones en lugares cerrados y luego cambiar drásticamente de temperatura al salir al aire libre, además del uso de dispositivos electrónicos, afirma Carina García, optometrista con especialidad en superficie ocular y ojo seco.
Explica que el ojo seco ocurre cuando hay una disminución en la producción importante de lágrimas. Se considera una enfermedad debido a las complicaciones y al porcentaje de la población que presenta esta condición.
En México más de la mitad de la población padece de ojo seco. A nivel mundial la prevalencia de esta afección ocular es de hasta el 70% en jóvenes y adultos, aunque que va de la mano a esta condición es la edad pues con los años se presentan ciertas enfermedades sistémicas que conllevan una disminución de la producción lagrimal o de los componentes de las lágrimas. Además, con la misma edad, disminuye la producción de lágrimas porque ciertos medicamentos, como antidepresivos, anticonceptivos orales, tratamientos para el acné, tratamientos para la diabetes y la hipertensión, o artritis, pueden disminuir la producción de lágrimas.
“Una edad exacta para decir quién puede padecer más ojo seco, actualmente, con uso de dispositivos electrónicos, desde los jóvenes hasta los adultos pueden padecerla. La tecnología nos ha venido a facilitar muchas cosas, pero nos ha venido a perjudicar en muchas otras, entre ellas la superficie ocular con los dispositivos electrónicos”, refiere.
Durante la temporada invernal suele presentarse de manera frecuente entre la población y que se tengan síntomas de ojo seco, que son sensación de un cuerpo extraño en el ojo, enrojecimiento, sensación de ardor, sensibilidad a la luz, y en algunos pacientes, a pesar de ser enfermedad de ojo seco, hay exceso en producción de lágrimas.
Paradójicamente, la epífora ocular (lagrimeo excesivo del ojo) es una característica común del ojo seco y que es por la carencia de una sustancia en las lágrimas que son los lípidos. La especialista recomienda que cuando haya síntomas de ojo seco se debe acudir con el profesional de la salud ocular, que haga las pruebas necesarias.
