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Rogelio Cabrera López, presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano, urgió a los ciudadanos no pedir dádivas durante el periodo electoral.
No puede la Iglesia ponerse a favor o en contra de partido político alguno, especialmente porque existen católicos en todos los partidos políticos.
Pidió a los partidos a que, una vez que obtengan los resultados, aguanten la pérdida y a que tampoco insulten al oponente que obtiene la victoria.
“[Desde la Iglesia], debemos tener un esmero muy grande en no parcializar nuestro mensaje y en respetar la madurez del pueblo mexicano. Considero que aún las leyes son demasiado protectoras del elector porque lo consideran un poco infantil, necesitamos una ciudadanía más fuerte, que sepa discernir la verdad de la mentira, promesas que no se cumplen y lo que es verdaderamente una promesa real”.
En cuanto a la pandemia, llamó al gobierno a estar cerca de la gente, sobre todo responder a las tres grandes necesidades que presenta, que son sanitaria, económica y violencia.
Muchas familias cada vez observan una situación más complicada para atender su salud, se enfrentan a necesidades de medicamento; también tienen hambre y se han perdido empleos. A lo anterior se suma el recrudecimiento de la violencia.
La violencia, tiene muchos niveles: está la que se vive entre personas, la de las calles y la que cometen los delincuentes profesionales.
Se trata de problemáticas a las que se enfrenta todo el país, por tanto, también Querétaro.
La pandemia, claro que da miedo, pero la Iglesia no se ha quedado cruzada de brazos, mantiene su labor a favor de los más necesitados, sobre todo al llevarles alimentos.
En cuanto a la solicitud que el Presidente de México emitió para que El Vaticano se disculpe, declaró que ya se han emitido muchas veces disculpas y que se continuarán dando cuando el tiempo lo exija, no cuando lo demande un presidente.
Respondió que todos los días, en cada eucaristía, la Iglesia Católica solicita perdón, y también lo hace cuando ocurren acontecimientos grandes en la vida religiosa o en la nacional, como ocurrió en el 2010, cuando con motivo de los 200 años del inicio del movimiento independentista de México, emitió un documento muy amplio, que fue presentado en la Basílica de Guadalupe; el próximo año se volverán a ofrecer disculpas, esto con motivo del aniversario de la consumación de la Independencia.