El gobernador Mauricio Kuri González descartó que Querétaro sea el hogar de líderes de la delincuencia organizada.
El mandatario estatal señaló que la “lucha descarnada” entre el Cártel Jalisco Nueva Generación y el Cártel Santa Rosa de Lima se ha extendido a muchos lugares del país y en esta ocasión le tocó a Querétaro; sin embargo, aseguró que hechos como el del pasado 9 de noviembre en el bar Los Cantaritos, no se va a permitir que vuelvan a suceder.
“Son pleitos que traen en otros estados, aquellos vienen aquí a descansar y vienen aquí a matarlos y, por otra parte, en la zona de San Juan del Río, pegado a Hidalgo, están peleando el tema de huachicol y estamos muy pendientes de eso”, declaró Kuri.
Aseguró que son diversas autoridades federales las que le han corroborado que Querétaro no es hogar de estos delincuentes, sino que vienen al estado por su seguridad y aquí los ultiman.
“Lo que me han dicho, no nada más una autoridad, sino muchas autoridades federales, es que por ejemplo, los que están en Guanajuato o en Michoacán, salen a buscar un lugar donde sea menos inseguro para ellos y buscan Querétaro, y en esta guerra descarnada que tienen entre estas dos bandas criminales que crecieron mucho y han crecido muchísimo, nos tocó ahora en Querétaro y no podemos permitir que esto suceda”, agregó.
Dijo que la única forma de impedir que este tipo de situaciones continúe sucediendo en el estado es con cero impunidad.
Destacó que prueba de que en Querétaro se está trabajando bien en materia de seguridad es el arresto de tres integrantes del grupo delictivo “Los Ardillos”, quienes operaban en el estado de Guerrero.
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Aunque destacó dichos arrestos, dijo que “no soltarán” la investigación para dar con el paradero de los responsables del ataque armado en Los Cantaritos, y para ello, detalló que se está trabajando con el acompañamiento de la Guardia Nacional, el Ejército, la Fiscalía General del Estado y la Secretaría de Seguridad Ciudadana del gobierno federal.