Querétaro requiere de un hospital psiquiátrico, advirtió Elydia Barbosa, presidenta y fundadora del Patronato Psicológico Queretano I.A.P. (PSYQUE).
Dijo que resulta irrelevante analizar el tamaño que podría destinarse, lo importante es contar con un lugar que permita a los queretanos recibir la atención que necesitan.
“La realidad es que los queretanos tienen enfermedades mentales que no les son diagnosticadas y, por tanto, no reciben la atención correspondiente. Las enfermedades mentales evolucionan a situaciones más graves, que pueden ser, por ejemplo, episodios de ansiedad, intentos de suicidio o sicosis; se necesita atender los problemas antes de que de que ocurran”, puntualizó Barbosa.
Existen diferentes situaciones que derivan de la falta de un hospital psiquiátrico en Querétaro, entre ellas, que las personas con un padecimiento mental se canalicen a un centro de rehabilitación de adicciones, que nada tiene que ver con su condición, apuntó
Otra situación es que se le remita a un hospital psiquiátrico en otra parte de la República; aunque sea en un estado cercano, lo que implica que esa persona y quienes la acompañen deben destinar dinero y tiempo que no tienen para recibir la atención, que no se les brindará por un periodo prolongado.
Aclaró que un hospital psiquiátrico no es la imagen que muestran las películas, en las que las personas están amarradas y babeando, se trata de una instancia a la que se recurre cuando existe un momento de crisis, que lleva a la necesidad de internar a la persona para que supere ese momento.
“No existe algo estipulado, pero, por ejemplo, cuando ocurre un intento de suicidio, lo ideal es internar a esa persona, hasta que logre disminuir la crisis que enfrenta; una vez que lo logra, se debe analizar el tratamiento que requiere y cuando se establece el ideal, se reincorpora a la sociedad”, dijo.
Agregó que lo que se necesita, cuando la situación lo exige, es brindar la medicina que el cerebro requiere para mantenerse estable, analizar la situación a la que se enfrenta en su entorno y la que enfrenta de manera personal.