El 11 de marzo de 2020 se informó, de manera oficial, del primer caso confirmado de Covid-19 en el estado de Querétaro; el mismo día que la Organización Mundial de la Salud (OMS) elevó a categoría de pandemia la propagación del  SARS-CoV-2.

Tras un año de pandemia en Querétaro, ya se contabilizan  57 mil 330 casos acumulados de Covid-19, 51 mil  763 de ellos son altas sanitarias (90.2%), revelan datos de Seseq.

El estado  tiene mil 707 casos activos, mil 309 de ellos son enfermos con sintomatología leve, aislamiento y manejo en su domicilio y 13 se recuperan en la Unidad Médica de Aislamiento Covid-19. Entre los  activos  hay 385  hospitalizados, de los cuales 129 se encuentran graves. La entidad acumula 3 mil 860 defunciones.

Sobre disponibilidad de camas generales y con ventilador en el estado, se tiene una ocupación de 40%, según la Red Negativa de Infecciones Respiratorias Agudas (IRAG).

Un año de incetidumbre

El primer caso fue un hombre de 43 años de edad que llegó de la Ciudad de México proveniente de España; antes, sólo había tres casos sospechosos que  fueron descartados.

Aquel 11 de marzo, la Secretaría de Salud del Estado reportó que “este varón residente de España viajó a México, vía el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, y se trasladó a Querétaro en auto particular para visitar a sus familiares; al presentar sintomatología se le practicaron las pruebas y el resultado fue positivo”.

Días después, la madre y padre del hombre resultaron positivos a la enfermedad, sin que ninguno ameritara hospitalización.

Hasta esa fecha, México reportaba 11 casos positivos a Covid-19, incluido el de Querétaro.

Tras conocer de este caso, y debido a que se sumaron a la lista de sospechosos -principalmente provenientes del extranjero-, se anunció el inicio de un confinamiento total.

Un cese en las actividades de todo tipo, excepto las consideradas esenciales: tiendas de comestibles, farmacias, servicios básicos, transporte; dicho confinamiento comenzó el 18 de marzo, incluida la cancelación de toda actividad escolar.

El 13 de marzo se sumaron tres contagios más; el país tenía  26 confirmados, cuatro de ellos en la entidad.

México reportó su primer fallecimiento el 18 de marzo de ese año, un hombre que comenzó con síntomas el 9 de marzo y que estuvo hospitalizado; padecía diabetes.

En Querétaro, según  la Secretaría de Salud estatal, la primera muerte se reportó el 28 de marzo: un hombre de 58 años de edad que fue hospitalizado; se convirtió en la décimo séptima víctima del país. Entonces eran 26 casos confirmados  en el estado.

Ese mismo día, el gobernador Francisco Domínguez Servién confirmó que resultó positivo a la enfermedad, por lo que tuvo que cumplir con aislamiento de dos semanas.

Durante  marzo de 2020 hubo un total de 29 nuevos casos y una defunción; en abril fueron 116 nuevos casos y 13 defunciones; en mayo, 864 casos y 100 decesos; en junio, mil 144 casos y 182 muertes; en julio, mil 759 casos y 211 fallecimientos.

Para el mes de agosto hubo 2 mil 787 casos y 268 víctimas mortales; en septiembre, 2 mil 833 casos y 282 defunciones; en octubre, 4 mil 807 casos y 271 muertes; en noviembre, 7 mil 960 casos y 294 fallecimientos; en diciembre, 9 mil 448 nuevos casos de Covid y 471 defunciones.

El último trimestre de 2020 estaba considerado, hasta entonces, con un alza constante de nuevos casos y de muertes por Covid-19; sin embargo, enero superó toda estadística como consecuencia de las fiestas decembrinas y las vacaciones de fin de año.

Para enero de 2021, los reportes indicaron 13 mil 737 nuevos casos y 908 defunciones; y para febrero hubo una disminución de los indicadores, en comparación con diciembre de 2020, hubo un 52% más de fallecimientos, aunque los casos positivos bajaron en 2.6%. Febrero tuvo 9 mil 199 nuevos casos y 716 defunciones.

Al corte informativo del 9 de marzo, con 365 días transcurridos del primer caso (2020, año bisiesto), Querétaro acumula 57 mil 330 casos positivos de Covid-19 y 3 mil 860 defunciones; es decir, 157 nuevos casos todos los días -en promedio- y 10.57 muertes también todos los días. Esto es una tasa de letalidad de 6.7 para el estado.
Medidas sanitarias

A partir de la evolución de la pandemia y con la declaratoria de emergencia sanitaria en México  y en el estado de en Querétaro, se instauraron diversas figuras legales locales para la atención del fenómeno.

Entre ellas la creación del Comité Técnico de Salud, constituido por 10 expertos con voz y voto y quienes toman decisiones entorno a las medidas sanitarias en la entidad.

También se establecieron reglas sobre las actividades permitidas, con estrategias delineadas por la federación y a través de la llamada “Jornada Nacional de Sana Distancia”; en Querétaro, uno de los lineamientos fue sobre la obligación de cremar cadáveres de las víctimas de Covid.

Para el 1 de junio, en el país entró en vigencia un sistema de semaforización; cuatro colores que indican el nivel de riesgo de contagio para cada una de las 32 entidades. También se amplió el criterio de actividades esenciales, permitiendo la apertura parcial de la industria aeronáutica, automotriz, construcción y minería.

Querétaro comenzó en semáforo rojo; para el 17 de junio, por decreto de autoridades estatales, se pasó a semáforo naranja (aunque a nivel federal no lo hizo hasta el 22 de junio) que permitió la apertura -con aforos restringidos- del comercio y demás actividades generales.

Para el 20 de julio, debido al aumento de casos, Querétaro regresó al semáforo rojo, aunque en la práctica se mantuvieron las mismas actividades y aforos, con algunas restricciones adicionales. El 16 de junio se alcanzó el naranja, que se mantuvo así hasta el  amarillo, el 28 de septiembre.

Sin embargo, este color duró solo dos semanas porque se regresó al naranja el 9 de octubre. Para el 18 de enero regresó al color rojo y luego pasó al naranja el 15 de febrero.

En tanto, el gobierno estatal estableció indicadores propios para modular la movilidad, de manera que el 28 de noviembre de 2020 estableció “escenarios”, el primero de ellos fue el máximo “escenario C”, con el se limitaron actividades; aunque se planteaba solo por tres semanas, los indicadores al alza impidieron el cambio, no fue hasta el 15 de febrero que se llegó al “escenario B”, que rige actualmente la movilidad del estado

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