Libretas, lápices, pegamentos, plumas, hojas, cartulinas, juegos de geometría, son algunos de los artículos que en estos días, previo al regreso a clases, buscan padres de familia, para que el lunes próximo estén en las mochilas de los menores que volverán a las aulas para el ciclo escolar 2024-2025.
En una papelería ubicada en las inmediaciones del mercado Escobedo, en la ciudad de Querétaro, las madres y padres de familia acuden para surtir sus listas de útiles escolares. Los empleados del local se multiplican para atender a los clientes que buscan los mejores precios o ciertos productos en especial.
Emanuel Herrera, licenciado en educación física y deporte, acude con su esposa Nayeli, para surtir la lista de útiles de sus dos hijos, Máximo y Allison. El chico entrará a segundo grado de primaria, mientras que la adolescente a segundo, pero de secundaria.
Nayeli dice que en promedio estima que el gasto en útiles, uniformes y calzado, es de poco más de cuatro mil pesos por cada chico.
Señala que la diferencia entre una lista de útiles de primaria y una de secundaria es que en el caso de la primera piden más material didáctico, mientras que en secundaria piden más libretas y cuadernos, pues al ser más materias estos útiles son más necesarios. Dice que su hija, en secundaria, este año tendrá entre 11 y 12 materias, cada una con una libreta, algunas son cocidas. Algunas libretas son de 200 hojas, siendo útiles con ciertas especificaciones y un poco más caras. “Para mí es común, porque todos los años lo hacemos”, indica.
En promedio, para primaria, gasta en útiles alrededor de mil 500 pesos, porque se gasta el hule cristal, pegamento, hilos, papel lustre, el precio de cada material, aunque también depende del producto que se compre, pues hay unos que son más baratos que otros, mientras que otros son más caros. “En secundaria se sube un poco más. Unos dos mil pesos”.
Mientras que, asevera, el gasto por estudiante son alrededor de cuatro mil pesos, tomando en consideración los gastos en uniformes, zapatos y tenis para deportes. “Tan sólo de los uniformes son, en promedio, mil 500 de los dos uniformes (de diario y deportes) a veces hasta dos mil, dependiendo de los uniformes. Hay más económicos que no llevan mucho diseño y los puedes conseguir más baratos. Pero si el uniforme es más especial hay que conseguirlo sólo en ciertos lugares y es donde están más caros. También los zapatos, los tenis. Cada quien un par. Son dos pares por niño para todo el ciclo”, explica Emanuel.
Sobre las cuotas de inscripción, comenta, en las escuelas públicas se cobran desde el fin del pasado ciclo escolar, por lo que ese gasto está cubierto.
La pareja cumple con comprar los útiles escolares de sus dos hijos para el próximo ciclo escolar. Ahora sólo deben forrarlos, disfrutar el último fin de semana de vacaciones y esperar el lunes para regresar a clases.
Muy cerca de ahí, los locales de mercado Escobedo que venden uniformes escolares son de los más socorridos por los padres de familia que buscan dichas prendas para sus hijos quienes iniciarán próximamente un nuevo año escolar.
Muchos padres de familias de escuelas públicas harán sus compras hasta la próxima semana, después de que las autoridades estatales hagan entrega de los paquetes de útiles escolares y uniformes que cada año reparten. Lo que representa un apoyo para las familias que tienen varios hijos en edad escolar.
Gerardo es padre de un hijo en secundaria. Acude a un plantel particular, donde le venden los libros que usará el adolescente a lo largo del año, lo que representa un gasto cercano a los seis mil pesos.
“Unos libros son de sus materias normales, como español, matemáticas, química, historia. Los otros libros son de inglés. Son libros que son igual o más caros que los de las demás materias. También, hay otros artículos que piden, como bata de laboratorio y cositas que se van sumando a lo largo del año”, comenta.
Agrega que además, al ser secundaria particular, hay que pagar los talleres por separado, entonces son más gastos que se deben de erogar en septiembre.
En esa secundaria, aunque son comprensivos con las colegiaturas, los libros los venden editoriales que los imprimen y los pagos se tienen que hacer en una sola exhibición, por lo que el gasto que representan se debe de hacer en una sola quincena.
“Los libros se tienen que pagar entre la última quincena de julio y la primera de agosto. A veces por los gastos mismos se junta el pago de los dos paquetes de libros y se hace pesado para pagar. Tienes que recurrir a la tarjeta de crédito. En la primaria donde iba mi hijo pagabas inscripción en mensualidades. Comenzabas a pagar desde febrero y terminabas en mayo. Pero en esa escuela te pedían muchas cosas para la escuela, como líquido para limpieza, cloro, toallas de papel, papel higiénico, dulces… era un gasto extra muy pesado”, subraya.
Ahora, con su hijo en la secundaria, los gastos son menores, pero aún así son gastos. Precisa que también debe comprar uniformes. Éstos se pueden adquirir en la escuela o en otros lugares, eso depende ya de cada padre de familia de dónde lo quiera realizar, pero deben de cumplir, dice el padre de familia.
