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Realizó el vicario general de la Diócesis de Querétaro, Martín Lara Becerril la ceremonia de Lavatorio de pies en el Centro de Readaptación Social Varonil de San José El Alto.
Participaron como apóstoles 12 personas privadas de su libertad, 6 sentenciadas, 6 procesadas.
Llamó a quienes se encuentran internos a tener presente la instrucción de Dios de amar a los demás como él amo a los seres humanos. La violencia surge cuando no hay amor.
Explicó que el lavado de pies es un acto de humildad y de servicio, por lo que los convocó a ayudar a los demás y a perdonar, en todo lugar en el cual se encuentren.
Amor y perdón resultan vital, es aprender a pedir perdón, también a perdonar, tanto a quien ofendió, como a uno mismo.
Se encuentran en en Cereso varonil 880 personas, 100 en el Femenil, 150 en el de San Juan del Río y 40 en el de Jalpan.
