Con la aprobación de un documento —que se denominó pliego petitorio— entre las autoridades de la Universidad Autónoma de Querétaro y estudiantes, que se llevó a sesión extraordinaria de Consejo Universitario, ayer poco después de las 8:30 de la noche terminó el paro que dejó a la institución un mes sin clases y actividades científicas.
El paro de actividades en la UAQ se dio desde el 30 de septiembre pasado en protesta por que se acusó que la autoridad universitaria fue omisa ante señalamientos de presuntos casos de abusos y acoso sexual que hizo la comunidad estudiantil en contra de maestros, investigadores y funcionarios.
A través de una transmisión virtual se compartió el acuerdo entre ambas partes. La rectora Teresa García Gasca argumentó que, tras el acuerdo, comenzará el trabajo para solucionar la violencia denunciada por la comunidad estudiantil.
Por su parte, los alumnos leyeron el pliego petitorio sobre el cual se regirá el trabajo; en el documento se incluyeron acciones concretas contra la violencia, además de que la autoridad universitaria se comprometió a no imponer sanción académica, administrativa o penal contra quienes participaron en el paro.
Los jóvenes que leyeron el documento forman parte del comité de Facultades Unidas, que se conformó por voceros que representan a cada Facultad y Escuela de Bachilleres. El encuentro se realizó sin la presencia de los medios de comunicación.
“Necesitamos trabajar todas, todes y todos de la mano [… ] cada quien desde la trinchera que le corresponda, para poder ir dando avances concretos contundentes puntuales certeros a este gran problema”, declaró García Gasca.
Autoridades y estudiantes acordaron que la violencia de género debe ser considerada como una falta grave en el interior de la institución educativa.
Previamente se informó que, para hoy, a las 12:00 horas, se programó la entrega de los bienes que son propiedad de la institución.
Las actividades académicas, en todos los niveles, están programadas para comenzar nuevamente el próximo jueves 3 de noviembre.