Los padres de familia y alumnos tendrán hasta el 10 de septiembre para cambiar de opinión respecto a mantenerse en las clases físicas o en las virtuales, ya que después será imposible cambiar de opinión, informó la Secretaría de Educación estatal.
El 10 de septiembre será el corte para tener certeza respecto a cuántos alumnos cursarán el año de manera presencial. Cada plantel deberá programarse a partir de la decisión que desde el inicio del ciclo les brinden los padres, de ahí que no se admitirán cambios posteriores, explicó José Carlos Arredondo Velazquez, titular de la dependencia.
“Les recomendé a los padres de familia que si no estaban seguros que mejor no los manden. Estamos esperando hasta el 10 de septiembre porque padres de familia que vean que está funcionando (el esquema) van a decir que quieren regresar a presencial, lo que no se va a valer es que después del 10 de septiembre haya un padre que diga ‘me vengo (al esquema) a distancia’ … tenemos que integrar en una misma escuela grupos presencial y grupos en línea”, expuso.
Al analizar el total escuelas autorizadas para actividades presenciales, 18.6 % del alumnado en la entidad se encuentra ya de manera física, pero remarcó que se trata de una actividad extremadamente cuidada, de tal forma que en ningún momento todos estarán el mismo día en su plantel, si acaso, diariamente se tendrá 9.3%, máximo.
Durante estos días, el secretario recorrió las escuelas autorizadas para el regreso físico, y dijo que la asistencia en cada una de ellas es variada; la que menos alumnos tiene registrados para actividades presenciales cuenta con 30%, mientras que la que más, superó 95%.
Los primeros 3 meses del regreso a clases resultan indispensables para diagnóstico, intervención y detectar áreas de oportunidad, dijo.
“Evidentemente tendrá que haber toda una logística, un recurso presupuestal que hay que preparar para habilitación (de planteles), para insumos; identificar los lugares dónde quisiéramos utilizar la misma metodología para la segunda etapa. Cada que avance una etapa será más complejo, porque el número (de estudiantes) irá incrementando, la movilidad irá incrementando y el gran desafío es, siempre, la incógnita de cómo estaremos en pandemia”, subrayó el funcionario.