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La Rectoría de la UAQ recibió 513 juicios laborales en contra de la institución, algunos de ellos existen desde 2012.
Sin ahondar en montos de cuánto representan estos litigios para la institución, Teresa García Gasca, rectora de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), expuso que los juicios más antiguos suelen ser los más costosos, de ahí que toda negociación se realiza teniendo en cuenta tanto los derechos laborales como las propias finanzas de la institución.
Durante 2021 la UAQ logró conciliar los procesos derivados de la terminación de la relación de trabajo de 43 personas, con las cuales firmó el mismo número de convenios.
Quedan pendientes por resolver 362 juicios laborales, de ahí que la meta de esta administración es resolverlos todos, además de trabajar para que no se registren nuevos casos.
Dentro de la política de la administración de la UAQ está evitar que más demandas se sumen; además, existe la instrucción de que no debe realizarse la separación de personal si es que no existe una causa justificada para ello.
De los casos resueltos, dos fueron de 2012 y en ellos se logró firmar un convenio de colaboración para cada uno.
“Cuando recibimos la administración había más de 500 casos de demandas laborales no resueltos, hemos ido resolviendo algunas, unas eran muy viejitas; incluso, tenemos una de antes de 2012, o sea, de dos administraciones anteriores.
“Ya las hemos ido resolviendo, ahorita nos quedan más de 300, junto con las nuevas; es como revolvente, y las hemos estado tratando de resolver”, expuso García Gasca.
Cada juicio implica que diferentes áreas de la UAQ deben actualizar los cálculos con respecto a los adeudos generados con el personal despedido, así como emitir los cheques para subsanarlos, cuando así corresponda.
“Mi meta sería quitar todo lo rezagado, ya resolver todo lo rezagado y entregar en 2024 [a la nueva administración] nada más los que estén en proceso, esa es la idea”, indicó la rectora García Gasca.
“Se trata de un gran esfuerzo el que debe realizar la institución para cubrir a los docentes pagos tras despidos que se generaron dentro de administraciones anteriores.
“No es sencillo, porque los [juicios], que son muy viejitos, son muy costosos, pero estamos trabajando en eso. Cuando tenemos que llegar a afrontar casos muy viejitos, hay que asumir que son costosos”, remarcó García Gasca.
Dentro de los juicios laborales que existen contra la UAQ también se encuentran los que generaron profesores jubilados, los cuales suman más de 20 casos en los que la UAQ aún realiza procesos en demandas de docentes jubilados.
La universidad debe buscar que las resoluciones sean justas para ambas partes, exdocentes y economía de la institución educativa.
“Estamos en el proceso, ya se estará dictando sentencia en los próximos días. Nosotros estamos cumpliendo.
“Yo, repito, lo que siempre he dicho, si tenemos alguna situación que cubrirles a las y los jubilados, haremos lo justo.
“No podemos no responderles a ellas y a ellos, pero tampoco podemos ser irresponsables, en términos de la universidad”, finalizó García Gasca.
