La rectora de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) Teresa García señaló que el déficit en los subsidios federales para organismos descentralizados estatales es catastrófico, en especial para las Universidades Públicas Estatales (UPES).
Al participar en la reunión entre el Consejo Nacional de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) y los presidentes de las Comisiones de Presupuesto y Cuenta Pública, y de Educación, Alfonso Ramírez Cuéllar y Adela Piña Bernal, respectivamente; convocada para analizar el Presupuesto de Egresos de la Federación 2020, en el rubro de Educación Superior pública, también García Gasca dijo que se ha tenido una drástica disminución de los fondos de proyectos concursables, que es de donde las Instituciones pueden hacer de recursos propios para compensar sus necesidades.
“No veo que haya un verdadero proyecto para la educación pública en el país. Veo la intención del Gobierno Federal para generar las 100 universidades del sistema Benito Juárez donde se está comenzando a poner recurso y esto está bien, (…) incluso podemos unirnos a esta propuesta, pero no descuidando las necesidades de las Universidades estatales”, puntualizó García Gasca, quien llamó a las autoridades a determinar de forma real las expectativas que se tienen para la educación superior pública.
En este sentido, los legisladores federales y el Consejo Nacional de ANUIES llegaron al acuerdo de generar una Convención Nacional Universitaria, a realizarse en la primera quincena de octubre; en la que participarán todos los actores de la Educación Superior: rectores, sindicatos, gobernadores, legisladores, Secretaría de Educación Pública, Secretaría de Hacienda y Crédito Público, entre otros; para analizar el futuro de la educación superior en México y estudiar los requerimientos financieros de las IPES, antes de que se apruebe el PEF 2020.
A este respecto, García Gasca manifestó su beneplácito por que se vislumbre la necesidad de unir esfuerzos, a fin de construir un proyecto en conjunto que les de viabilidad a las UPES.
Cuestionó la asignación de recursos a las UPES con base únicamente en una expectativa conservadora del monto inflacionario, sin realmente pensar en sus necesidades ni tampoco valorar sus resultados en materia económica, académica y de responsabilidad social.
“No ha habido una convocatoria en que en realidad se nos soliciten indicadores puntuales de crecimiento armónico con las políticas federales para la Educación Superior. Por un lado, se nos solicita un Plan de Austeridad que todas cumplimos con gusto, pero la intención ha ido básicamente a la transparencia y rendición de cuentas, sin embargo, todos los demás indicadores que obedecen a las funciones sustantivas de las Universidades han quedado fuera”, señaló.
“No se nos ha preguntado, para la asignación de recursos, cómo vamos en inclusión, en equidad, cuántas comunidades de bajos recursos atendemos, si estamos generado campus en zonas con dificultades económicas, cómo aumentamos la matrícula, si la planeación de nuestros nuevos programas académicos es pertinente con las políticas educativas”.