En general, vivir estos eventos es suficiente para haber sufrido estrés postraumático, sin embargo, los daños emocionales no terminan ahí, sobre todo para aquellos que no sólo vivieron el terremoto sino que perdieron algo más, ya sea su patrimonio o a un ser querido.

Octubre es el mes dedicado a todas aquellas guerreras que luchan contra el cáncer de mama