Elena, quien trabajó desde niña apoyando a los entonces encargados de vender el alimento, es ahora dueña del local que por años ha conservado la receta secreta del tradicional platillo, para gusto de clientes y visitantes que buscan probar algo nuevo

Gerardo tiene 36 años vendiendo ropa, joyería, cortinas y edredones –que trae de Estados Unidos– en el tianguis sabatino de la colonia Presidentes, uno de los más concurridos de la capital queretana