Esa margarita te hará sentir más feliz y llena, pero no le hará ningún favor a tu cintura. Y por fortuna hay suficientes bebidas que podrías tomar sin culpa, y no sólo eso, sino que también te ayudarán a bajar de peso.
Agua de sabor: Mantenerte hidratada es importante cuando estás tratando de bajar unos kilos de más. Claro, puedes engañarte para tomar el agua suficiente, pero si de plano detestas tomar agua simple, puedes combinarla con frutas con más agua, como sandía, pepino o piña. Siempre y cuando no agregues azúcar, recibirás los beneficios.
Smoothie de sandía: Los smoothies son excelentes bebidas para hidratarte… siempre y cuando no tengan azúcar. La sandía específicamente no sólo es natural, sino que también contiene mucha agua y es rica en nutrientes. Además por sí misma es muy dulce, así que no te costará trabajo reemplazar un refresco por ella.
Té helado de menta: La menta suprime el apetito, es fresca y quema calorías. Ya conoces los beneficios del agua y del té, pero si eliges la menta, tu estómago procesará la grasa de mejora manera, y los alimentos grasosos serán digeridos súper rápido para evitar la inflamación.
Té verde: Además de reducir el riesgo de cáncer y enfermedades del corazón, el té verde contiene antioxidantes que reducen la grasa abdominal. Sí, así como lo lees, una taza de té antes de hacer ejercicio, podría duplicar la cantidad de calorías quemadas, especialmente durante el ejercicio aeróbico.
Frappé de piña: La piña, además de tener mucha agua, quema muchas calorías. Y si combinas tu frappé con semillas de chía o girasol, obtendrás mejores beneficios, especialmente porque la piña tiene una encima que ayuda a digerir la proteína, mejorar la digestión y eliminar la inflamación.