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Durante la Cuaresma los pescados son uno de los alimentos que más destacan. El huachinango, es solo una de las tantas especies que se consumen en el país, pues se estima que se pescan alrededor de 19 mil toneladas al año, lo cual lo ubica como el quinto producto de mayor importancia comercial en su sector a nivel nacional.
El huachinango, al igual que diversas especies marinas forman parte de las “dietas sanas”, de hecho, se recomienda su consumo dos veces por semana, pues su carne es de fácil digestión, aporta muy pocas calorías y es de los pescados con más bajos niveles de grasas, además, por cada 100 gramos que consumamos, nos aportan 21 gramos de proteínas.
Entre los beneficios que este pescado trae a la salud está que actúa como cardioprotector, así como ayuda a controlar el peso de las personas, ayuda a la buena circulación y previene varices y hemorroides.
El grupo de vitaminas del complejo B es uno de los que más destaca en el huachinango, pues de acuerdo con médicos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), tener buenos niveles de vitaminas del complejo B ayuda a evitar la anemia, previene los síntomas de la depresión, ayuda a regular el apetito, impide la debilidad muscular y en mujeres embarazas evita malformaciones congénitas de los bebés.
Este pescado también es una buena fuente de fosforo, un mineral esencial que juega un papel fundamental en el sistema óseo, y que junto a la fibra y la niacina mejoran el proceso digestivo, atenúa los síntomas de la menopausia pues se encarga de regular las hormonas.
Este pescado es muy fácil de cocinar, pues se puede hacer frito, a la plancha o al horno y se puede acompañar con diversos vegetales.
