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Con un gigantesco mensaje de "Resiste", miles de manifestantes tomaron las calles del centro de Los Ángeles para exigir fin al odio, a las deportaciones y respeto a los derechos laborales.
Decenas de organizaciones convocaron a la marcha que esta vez fue afectada por un día nublado y llovizna a ratos, pero que no mermó el ánimo de muchos que bailaron y lanzaron consignas.
"Queremos que nos dejen tranquilos. Basta de acosar a nuestras familias y a los inmigrantes deben reconocer nuestra aportación a la economía de este país", señaló Laura Gómez.
"El presidente Donald Trump solo ha avivado el odio, el rencor y la división entre los estadunidenses, y le demandamos que ya basta de perseguir a los inmigrantes", urgió por su parte Roberto Muñoz.
"Trump con sus ataques solo crea división en este país y no debemos caer en esa trampa. Debemos resistir y lo vamos a lograr, vamos a seguir adelante", señaló María Elena Durazo, de la Federación de Trabajadores de Los Ángeles.
"Todos los días ocurren violaciones de derechos humanos, laborales y civiles de los inmigrantes en este país, y por eso demandamos un alto a esta represión", afirmó por su lado Angélica Salas, directora de CHIRLA.
"En la frontera tenemos a decenas de familias que caminan por más de un mes y piden ayuda y protección a sus vidas, y ni a eso responde este gobierno", añadió la dirigente de la Coalición por los Derechos Humanos de Inmigrantes (CHIRLA).
"Las elecciones tienen consecuencias, y las consecuencias para nuestra comunidad han sido terribles, y si no cambiamos el equilibrio de poder, cuestionamos nuestra capacidad de permanecer libres en este país", advirtió Salas.
En lo que ha sido una constante ya de años en la demanda se urgió una reforma migratoria, aunque ya esta consigna ha pasado a segundo término porque ahora prevaleció más la exigencia del alto al odio y a las deportaciones.
Este día al menos tres marchas iniciaron en distintos puntos del centro de la ciudad, lo que causó un gigantesco caos vehicular en esta de por sí congestionada ciudad.
El 1 de mayo, también conocido como el Día Internacional de los Trabajadores, ha sido durante mucho tiempo un evento clave en Los Ángeles para una protesta de causas políticas, especialmente los derechos de los trabajadores y los inmigrantes, y ha atraído a miles de personas en años pasados.
El martes, justo antes del mediodía, la multitud de docenas de personas que se habían reunido para una marcha por el centro organizado por la Coalición Primero de Mayo, era más pequeña que en años anteriores, dijeron los asistentes.
El martes se planificaron varias marchas en todo Los Ángeles y se esperaba que atrajeran multitudes de activistas por los derechos de inmigrantes, sindicatos y defensoras de las mujeres y miembros de la minoría lésbico-gay-bisexual-transexual-intersexual y queer (LGBTIQ).
Los funcionarios de transporte comenzaron a cerrar las calles del centro a las 05:00 horas locales, y los funcionarios de la ciudad advirtieron a los viajeros que anticiparan retrasos y congestión en torno a los eventos.
La coalición de sindicatos y defensores de los derechos de los inmigrantes planeaban marchar desde Pershing Square hasta Main Street, y luego hasta Temple Street hasta el Roybal Center muy cerca de las cortes de migracion.
Otra multitud estaba lista para reunirse cerca de Temple Street y Grand Avenue alrededor de las 09:00 horas antes de marchar hacia el este en First Street y unirse al primer grupo en el Roybal Center.
Una tercera marcha comenzó en el Olympic Boulevard y Broadway. Esos manifestantes marcharon por Broadway hasta First Street, al este, hasta Main Street y luego al norte hasta Olvera Street.
Los activistas con la Coalición Answer dijeron que los mítines de este año marcarán una "ocasión para continuar la lucha contra la agenda de extrema derecha de la administración Trump".
Entre los manifestantes estaba Sofía Camacho, quien con una bandera mexicana en la espalda decía que participaba por el orgullo de ser hija de padres mexicanos y que acudía en su nombre en la marcha para decirle al presidente Trump que no los derrotarán a pesar de sus mensajes de odio y de intimidación.