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Roma.— Al menos 117 personas están desaparecidas tras el naufragio de un barco inflable con inmigrantes a 80 kilómetros de las costas de Libia, de acuerdo con el testimonio que dieron tres supervivientes —rescatados por la Marina italiana— a la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
El accidente representa la tragedia más reciente en la peligrosa ruta del Mediterráneo central de África del norte a Europa.
Un helicóptero de la Marina italiana que intervino en la zona de rescate libia (SAR) rescató a tres náufragos, “uno en el agua y otros a bordo de botes salvavidas lanzados por un avión de la fuerza aérea”, afirmó el almirante italiano Fabio Agostini.
Flavio Di Giacomo, de la OIM, dijo que, según los sobrevivientes, “desafortunadamente cerca de 120” migrantes iban a bordo del sobrecargado bote al momento de partir de las costas de Libia, el jueves por la tarde.
“Después de un par de horas, empezó a hundirse y la gente se empezó a ahogar”, afirmó, y añadió que entre los desaparecidos hay 10 mujeres y dos niños, entre ellos un bebé de dos meses.
Los sobrevivientes indicaron que los migrantes con quienes viajaban provenían de Nigeria, Costa de Marfil, Gambia y Sudán, detalló Di Giacomo.
El presidente italiano Sergio Mattarella, quien ha exhortado al gobierno a mostrar más compasión por los migrantes, expresó su “dolor profundo por la tragedia que ha ocurrido en el Mediterráneo”.
Los migrantes venían en su mayoría de Nigeria, Camerún, Gambia, Costa de Marfil y Sudán, de acuerdo con la OIM.
El Alto Comisionado de la ONU para los refugiados evocó por su parte otro naufragio ocurrido en el mar de Alborán, entre España y Marruecos, en el que 53 personas habrían muerto.
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