El papa Francisco aterriza en Chile, donde se espera que haya protestas tras diversos escándalos que involucran a miembros de la iglesia católica en abusos sexuales a menores.
Esta será la primera visita de Francisco al país sudamericano desde que se convirtió en papa en 2013.
Tras bajar del avión se encontrará con la presidenta Michelle Bachelet. Durante los siguientes tres días celebrará misa en Santiago, la ciudad sureña de Temuco y la norteña de Iquique. El jueves se irá a Perú.
La agenda de Francisco contempla abordar temas de indígenas e inmigración.
Antes de aterrizar, el papa Francisco envía saludos a su país, Argentina.
El papa no ha visitado su tierra desde que asumió el cargo hace cinco años aunque ha realizado seis viajes a otros países de América Latina.
Algunos observadores de El Vaticano atribuyen esta situación a que Francisco podría estar evitando que miembros de la política de su país utilicen su visita como una oportunidad de hacer propaganda y beneficiarse.
Autoridades del gobierno de Chile dicen que ningún tema estará fuera de los límites durante el encuentro que sostendrán la presidenta Michelle Bachelet y el papa Francisco el lunes por la noche.
La vocera del gobierno, Paula Narváez, aseguró que Bachelet percibe la visita como la de cualquier jefe de Estado.
ABORTO EN CHILE
Muchos chilenos han expresado recientemente su preocupación ante la posibilidad de que Francisco apoye abiertamente la intención de Bolivia de obtener una porción de territorio chileno para recuperar una salida al mar. El tema es sensible para los chilenos, quienes piensan que acceder a la petición boliviana comprometería sus fronteras nacionales.
Además se ha hablado sobre la posibilidad de que el papa presente propuestas para legalizar el aborto en la nación andina. Actualmente éste sólo es legal si está en riesgo la vida de la madre, en caso de violación o cuando el feto se considera inviable.
Históricamente, la Iglesia Católica ha tenido una fuerte influencia en Chile, logrando que las leyes antiaborto se mantengan como unas de las más restrictivas del mundo.
Sin embargo, desde los noventa empezó un lento declinar de la iglesia a los ojos de la opinión pública, que decayó aún más tras conocerse los abusos sexuales de Fernando Karadima, el mayor cura pedófilo en la historia de la iglesia católica local.
PROTESTAS
Horas antes de la llegada del papa Francisco a Chile, activistas exigieron que se castigue a curas que han cometido abusos sexuales y también a cualquier persona que haya intentado encubrirlos.
En un seminario en la capital chilena, los activistas dijeron que además de pedir perdón, es momento que el papa actúe en contra de los abusadores en la nación sudamericana.
Al encuentro asistieron alrededor de 200 personas y es parte de una serie de actividades, incluidas varias protestas, que pondrán el abuso sexual por curas como un tema central de la visita de Francisco a Chile, la primera que hace como pontífice a esa nación.
El abuso sexual por parte de sacerdotes es una herida abierta en el país, en parte porque hace unos años Francisco nombró obispo a un cura cercano a Fernando Karadima, considerado el mayor cura pederasta en Chile.
Juan Carlos Cruz, quien fue abusado por Karadima cuando era un niño, dice que es momento que el papa inicie acciones para enfrentar la situación.
Francisco llega el lunes a Chile como parte de un viaje de siete días que también lo llevará a Perú.