Ante la grave problemática del sobrepeso, la obesidad y todas sus consecuencias en la salud, los consumidores tienden a buscar alternativas paraendulzar los alimentos con menos carga calórica sin sacrificar el sabor y, como respuesta, llegan al mercado productos elaborados con ingredientes naturales como la estevia, un sustituto natural del azúcar, pero sin calorías. La estevia que pedimos en restaurantes para endulzar nuestra bebida o que compramos en el súper empaquetada para tener en casa proviene de la planta stevia rebaudianay es nativa de América del Sur. Se caracteriza por ser naturalmente dulce y, en ciertas partes del mundo, ha sido usada por cientos de años. De acuerdo con información de Maricarmen Osés, nutrióloga y vocera de Splenda, lo único que está aprobado para el consumo son los extractos purificados de la planta, mismos que han sido certificados en México, Estados Unidos, Japón, China y la Unión Europea, entre otros países.
“En las hojas de la estevia se producen sustancias llamadas glicósidos de esteviol, las cuales dan el sabor dulce, ya que tienen una molécula de azúcar adherida a su composición. Existen, por lo menos, 12 glicósidos de esteviol conocidos y todos tienen la misma columna vertebral, aunque el nombre de cada compuesto depende de la posición en la que se encuentre adherida la molécula de azúcar en su composición,” indica la nutrióloga. Es seguro Señala que su consumo está sustentado científicamente, pues en diversos países se han hecho estudios que demuestran su inocuidad y su uso seguro para el humano. Destaca que una de las características más importantes de los compuestos de la estevia es que puede endulzar hasta 300 veces más que el azúcar, pero sin calorías. A diferencia de otros edulcorantes, la estevia puede ser consumida por todos los miembros de la familia, incluyendo niños, mujeres embarazadas y en periodo de lactancia, además de personas con diabetes, pues su ingesta no aumenta los niveles de la glucosa sanguínea.