Comprar un auto usado es una de las mejores maneras de obtener una buena relación costo-beneficio para el que lo adquiere. Sin embargo, también cuenta con algunas desventajas y éstas son las que generar miedos a los compradores.
Dueños irresponsables y papeleo mal hecho son algunos de los miedos más comunes que tiene la gente al comprar un coche usado. Te mencionamos cómo hacerles frente:
-Que el auto no esté en buenas condiciones
No está mal dudar sobre la veracidad de lo que el vendedor nos está diciendo sobre el auto. Existe gente que maquilla las condiciones de su vehículo y su historial de reparaciones mecánicas.
Si tu compra es a un particular, pide al dueño que te deje revisarlo o traer a un experto para que lo revise al final “el que nada debe, nada teme”¿cierto?. También puedes acercarte a lugares o plataformas en línea donde a los usuarios sólo se les permite vender su coche después de una inspección.
-Que el papeleo esté incompleto o sea complicado
Aunque el dueño del auto que vamos a comprar nos asegure que ya están todas las tenencias, multas y trámites estén pagados y completos, exige los comprobantes. Igual una revisión al portal de la Secretaría de Finanzas podría darte certeza extra.
-Tener pocas opciones de pago
Aunque cuando escuchamos “comprar auto usado” lo primero que se nos viene a la mente es un pago de contado entre particulares, ya existen opciones adquirir un coche a través de paginas especializadas que ofrecen financiamientos. También las agencias de autos y bancos ofrecen autos con uso previo.
-No hay garantía
Lo más complicado después del proceso de compra es asegurarse que tu compra fue la correcta y no terminarás arrepentido. Es cierto que un vendedor particular no te puede ofrecer ninguna garantía, pero puedes buscar dueños que sean gente de confianza con la que puedas hablar si existe un problema. (amigos, amigos de amigos, compañeros de trabajo, etc.).
Algunos portales o locales tienen esquemas de garantía que pueden hacer más fácil la compra. Unos, por ejemplo, ofrecen días o kilómetros de prueba, reembolso o hasta garantías de seis meses.
