Tendencias

Miles de personas en la Marcha por la Ciencia en Washington

En solidaridad con la marcha de Washington hay convocados más de 600 actos a nivel mundial.

FOTO: Archivo El Universal
22/04/2017 |12:02
Redacción Querétaro
RedactorVer perfil

Coincidiendo con el Día Mundial de la Tierra, varios miles de científicos y simpatizantes se congregaron hoy en Washington y distintas ciudades del mundo para sumarse a la Marcha por la Ciencia.

Los organizadores pretenden así protestar contra la postura del presidente estadounidense, Donald Trump, en la materia, defendiendo el papel de la ciencia en la sociedad y pidiendo una política basada en hechos demostrables. En solidaridad con la marcha de Washington hay convocados más de 600 actos a nivel mundial.

AUSTRALIA Y NUEVA ZELANDA: "El cambio climático lleva muchos años siendo zona cero para las verdades alternativas", lamentó el profesor James Renwick en la manifestación de la capital neozelandesa, Wellington, que junto a otras ciudades en Australia fueron los más madrugadores en sumarse a la Marcha por la Ciencia.

"La elección del presidente Trump y la posible salida de Estados Unidos del Acuerdo de París son muy desalentadoras", añadió en referencia al pacto mundial logrado en 2015 para combatir el cambio climático.

MÉXICO: En la Ciudad de México, la movilización avanzará desde el Ángel de la Independencia hasta el Zócalo de la ciudad, dos puntos neurálgicos de la capital. Los organizadores piden un aumento del presupuesto en becas y proyectos por parte del Conacyt (Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología), el organismo público más importante del país para el desarrollo de la investigación y la ciencia.

Además, también se sumaron a la convocatoria diversas organizaciones estudiantiles y de investigadores. Exigen que se invierta al menos el 8 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del país en el sector educativo, sin importar las administraciones en turno.

ESPAÑA: Varios miles de personas salieron a la calle en ciudades como Madrid, Barcelona, Sevilla o Granada, donde asociaciones, partidos políticos, sindicatos y entidades académicas y científicas secundaron la Marcha por la Ciencia.

Además de pedir un mayor presupuesto para proyectos y una mejora de las condiciones para investigar, los manifestantes se solidarizaron con "la difícil situación" que atraviesa el sector en Estados Unidos desde la llegada de Trump al poder, según explicó a los medios uno de los organizadores de la marcha de Madrid, Javier Jiménez.

En clave interna, los convocantes de la protesta en España anunciaron hoy que se reunirán próximamente con los partidos políticos para pedirles que secunden un "gran pacto social por la Ciencia".

ALEMANIA: Miles de alemanes, especialmente en las ciudades universitarias, salieron a la calle para llamar la atención sobre la importancia de la ciencia y a favor de una política basada en hechos. Solo en Berlín cerca de 11.000 personas, según los organizadores, se manifestaron bajo el lema "La ciencia no es una opinión, los hechos alternativos son mentiras".

"No podemos aceptar que en tiempos en los que el ser humano cambia este planeta como nunca antes en la historia se tomen decisiones sin recurrir a los hechos científicos", declaró el presidente de la prestigiosa Sociedad Max Planck para la Promoción de la Ciencia, Martin Stratmann, en la marcha en Múnich, que según la Policía reunió a cerca de 3.000 personas. "No debemos fingir ser más tontos de lo que somos", agregó.

SUIZA: Unos 600 manifestantes, según los organizadores, se reunieron en Ginebra, donde la Marcha por la Ciencia es especialmente simbólica debido al gran número de organizaciones mundiales que tienen su sede allí. Tras la protesta, la población podrá disfrutar de una Fiesta de la Ciencia, que supondrá una oportunidad de contemplar de cerca el trabajo científico.

REINO UNIDO: Biólogos, físicos, astrónomos y otros colectivos científicos se congregaron también en Londres para secundar la Marcha por la Ciencia, aunque su protesta se centró sobre todo en el "Brexit". La comunidad científica teme que la salida de Reino Unido de la Unión Europea pueda lastrar proyectos internacionales de investigación y ahuyentar a los expertos.