La oleada de incendios de los últimos días en España y Portugal ha dejado 45 muertos además de innumerables daños en ambos países. El esfuerzo de miles de bomberos y voluntarios por frenar el fuego ha sido incesante.
Entre la lucha por combatir las llamas se ha dado ha conocer una gran cantidad de imágenes de la tragedia, pero hay una que ha logrado darle la vuelta al mundo: la de una perrita que lleva en el hocico el cuerpo calcinado de un cachorro.
La imagen, captada por el fotógrafo de la agencia EFE, Salvador Sas, muestra a una perra en una calle del poblado de Chandebrito, provincia de Pontevedra, mientras carga en su boca lo que, a primera vista, parece madera calcinada. Pero, al ver los detalles, se aprecia la cabeza, boca, orejas y patas de un cachorro carbonizado.
El can no pudo proteger a su cría del fuego, pero en cuanto las llamas cedieron buscó entre los escombros y las cenizas el cuerpo del pequeño, del cual no quería separarse.
Bomberos y voluntarios han organizado brigadas para rescatar animales heridos o alimentar a los sobrevivientes, mientras activistas y asociaciones se organizan en redes sociales para apoyar en su cuidado.
La Fundación del Oso Pardo, dedicada a la conservación y protección de esa especie, denunció que los incendios han causado un gran estrago a la población de osos y la fauna y flora salvaje en general.
La organización cree que el fuego en esta zona fue provocado y pidió a las autoridades “una investigación de los hechos en profundidad que culmine con la detención de los responsables”.
La lluvia y el descenso de la temperatura ayudaron a los bomberos en Portugal y España a controlar la mayoría de los 700 focos de fuego.