Hoy se dio a conocer sobre el hallazgo de una nueva cámara vacía en el interior de la pirámide de Keops en Giza, Egipto, por parte de investigadores del proyecto Scan Pyramids.
Los expertos utilizaron imágenes basadas en rayos cósmicos, lo que demuestra cómo la física de partículas moderna puede revelar información sobre estructuras antiguas.
Los científicos analizaron las imágenes generadas por una partícula cósmica conocida como muon, que se activa cuando partículas subatómicas procedentes del espacio exterior entran en contacto con la atmósfera terrestre.
Esta tecnología ya se ha empleado en otras ocasiones, como la radiografía hecha a la Pirámide del Sol, en Teotihuacán, en el 2013.
En esa ocasión científicos de la UNAM se propusieron investigar si dentro de la Pirámide del Sol había cámaras ocultas o entierros ceremoniales.
En colaboración con arqueólogos del INAH, los investigadores del Instituto de Física diseñaron, construyeron e instalaron un sistema de detección de partículas elementales para trazar una especie de "radiografía" de la pirámide.
Los muones cuentan con una carga eléctrica negativa y se desplazan en línea recta a una velocidad cercana a la de la luz y son capaces de atravesar la tierra o cualquier estructura, sin embargo mientras avanzan se reduce el número de partículas.