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Washington.— El presidente Donald Trump acusó ayer a China de querer interferir en las elecciones legislativas de Estados Unidos, en noviembre próximo, al atacar a granjeros y trabajadores en la guerra comercial entre las mayores economías del mundo.
Las acusaciones de interferencia electoral se sumaron a un panorama ya cargado luego de que el lunes el gobierno de EU informara que impondrá nuevos aranceles a las importaciones desde China por 200 mil millones de dólares, a lo que Beijing respondió ayer con aranceles por 60 mil millones de dólares anuales en “represalia”.
Pero Trump, en un momento en que el Partido Republicano teme perder escaños en las legislativas, cree que China está llevando las represalias a la arena política.
Este tema adquiere un cariz aún más sensible después de las acusaciones de que Rusia interfirió en las elecciones que llevaron a la sorpresiva elección del magnate en 2016.
“China ha declarado abiertamente que están tratando de impactar y de cambiar nuestras elecciones, atacando a nuestros agricultores y trabajadores industriales por su lealtad a mí”, escribió Trump en Twitter.
“China ha estado aprovechándose de Estados Unidos en materia comercial durante muchos años. Ellos también saben que yo soy quien sabe cómo detener esto”, agregó.
En medio de la escalada de aranceles, Trump lanzó una última advertencia: “Habrá una represalia inmensa y rápida contra China si nuestros agricultores, ganaderos y/o trabajadores industriales son golpeados”, insistió en la red social.
La anterior salva de gravámenes que impuso China golpeó de lleno a la producción agropecuaria de Estados Unidos, con aranceles para la carne de cerdo y la soya, producidos en estados como Illinois, Kansas y Mi-nnesota, que están en juego en las legislativas de noviembre.
Según las últimas encuestas realizadas por NBC News/Marist la guerra comercial, un pilar de la política de Trump, es algo impopular en seis estados clave: Illinois, Indiana, Missouri, Pennsylvania, Tennessee y Texas.
Trump aumentó el lunes la presión sobre Beijing con más aranceles, que entrarán en vigor el 24 de septiembre. Los productos afectados incluyen receptores de voz digitales, módulos de memoria informática, procesadores y equipos de oficina, como fotocopiadoras. Entre los que se excluyen están dispositivos electrónicos como relojes inteligentes y aparatos de bluetooth.
La respuesta china.
China anunció ayer que aplicará aranceles a las importaciones estadounidenses por unos 60 mil millones de dólares, como contragolpe a los gravámenes de EU.
El Ministerio de Comercio de China (MOC) expresó su condena a la decisión de Washington de imponer aranceles adicionales a productos chinos. “Expresamos profundos remordimientos sobre esto [los nuevos aranceles estadounidenses]. Para defender nuestros derechos legítimos y salvaguardar el orden global de libre comercio, la parte china se verá obligada a responder de manera recíproca”, dijo.
Sus aranceles entrarán en vigor también el día 24, informaron las autoridades chinas.
arq