Actualmente, los seres humanos utilizamos nuestro celular constantemente, debido a la practicidad que nos brinda, y sus diferentes funciones que vuelven nuestra vida más fácil, pero al mismo tiempo nos convierte en dependientes de el, y por ende un poco más estúpidos, al menos así lo considera un estudio realizado por la Universidad de Chicago.
El documento "Brain Drain: The Mere Presence of One’s Own Smartphone Reduces Available Cognitive Capacity", concluyó que el estar lejos o separados de nuestro equipo móvil, puede resultar benéfico para aumentar nuestras capacidades cognitivas. Se llegó a estas conclusiones después de someter a pruebas de memoria a corto plazo y de habilidades de razonamiento a un grupo dividido en tres bloques.
Así, el primer bloque contaba con la posibilidad de tener sus teléfonos sobre el escritorio, otro los equipos guardados en mochilas o bolsos y el último con sus teléfonos guardados en otra habitación. Terminadas las pruebas se demostró que el tercer grupo obtuvo un desempeño mejor.
“Aunque estos dispositivos tienen un potencial inmenso para aumentar nuestro bienestar, su presencia continua puede generar un costo cognitivo”, señalaron los creadores del estudio.
Es así que se comprobó que nuestros celulares nos vuelven más tontos, ya que "chupan nuestro cerebro", ya que su sola presencia ‘drenan el cerebro’, lo que limita nuestra capacidad cognitiva.
Los investigadores indicaron que esto ocurre porque nuestro cerebro orienta una parte de su atención en estar al pendiente del móvil, y de los archivos que recibe, como una notificación, lo que hace que centre su atención en saber de qué se trata.