Negocio en auge, las smoke shop, como la de Maximiliano Devars Cuellar cada vez son más populares entre los fumadores. Con su surtido de productos para quemar tabaco o cualquier otra sustancia orgánica, estos locales prosperan.
Ubicada en una plaza comercial en avenida Tecnológico, Shiva, desde hace dos años ofrece a sus clientes una amplia variedad de artículos para fumadores, como pipas, bongs, papel arroz, shishas, vaporizadores, hitters y grinders, así como artículos más conocidos como encendedores, ceniceros, camisetas y gorras, estos últimos, con estampados de hojas de cannabis.
La mercancía está perfectamente ordenada y un aroma a incienso impregna el lugar, pues ese es otro producto que se vende en el sitio.
Maximiliano, abogado de profesión, explica que son dos tiendas de este tipo que abrió hace dos años, motivado por la sencilla razón de que él es fumador y le llamó la atención, además de que se califica como una persona emprendedora, a quien le gustan los negocios, y una smoke shop no es un negocio tan común y que tiene un mercado importante.
Dice que en la ciudad no pasan de 15 tiendas de este tipo. En su caso todos los productos son importados “hay cosas que, como todo, vienen de China, hay productos que son de importación europea, norteamericana, pero casi todo es chino, con excepción de cuestiones de electrónica o cosas de marca que vienen de otras regiones”.
Como tienda de fumadores, indica, venden todos lo productos que se utilizan para fumar tabaco o materia orgánica, desde papel arroz, para que el fumador se pueda hacer sus propios cigarros, con el tabaco o cualquier otra materia orgánica, así como pipas, que son de diversos materiales, desde madera hasta metal, pasando por la piedra y el vidrio.
“Hay algo que se llama vaporizador, lo que hace es que no quema la planta, la vaporiza, entonces como tal no hay una combustión y es menos daño para los pulmones. También vendemos el cigarro electrónico que es un vaporizador de esencia, esto es conocido para dejar el cigarro, y te hace menos daño”, explica.
Agrega que también se pueden encontrar pipas de agua, de la cual hay dos tipos, una conocida como shisha que son procedentes de la cultura hindú y cuyo uso es muy común en esas regiones, para lo cual se usa un tabaco con una mezcla de melaza, que da diferentes sabores.
Lo que hacen estas pipas es limpiar el humo producto de la quema de la materia orgánica, pasa por el agua y se purifica.
Hay otra pipa de agua conocida como bong, y generalmente son de vidrio, aunque también hay de plástico y acrílico, pero actúa de la misma manera que la shisha, pero con más filtros, para lograr una mayor pureza y se fume la menor cantidad de sustancias nocivas.
También se pueden encontrar moledoras, que se usan para triturar la planta y se pueda armar un cigarro de manera normal, así como armadoras o forjadoras de cigarros, para elaborar sus propios tabacos.
Incluso se pueden encontrar papeles para forjar cigarros hechos del tallo de la marihuana, totalmente libre de THC, por lo que venta es totalmente legal, pero tiene esa peculiaridad, además de que tiene un sabor diferente, que da un toque especial al cigarro.
“Todos estos productos se pueden utilizar para la quema de tabaco, pero también hago mención a cualquier otra materia orgánica, pues puedes fumar cualquier otra cosa. Hay algo que se llama jazmín, y es la mezcla de diversas plantas y eso lo fuman y es legal".
Negocios como el de Maximiliano, en otras partes del mundo, donde la compra y venta de marihuana es legal se han visto beneficiados por esta apertura en las políticas públicas en torno a esta planta. El joven abogado es consciente de eso.
“Yo abrí este negocio esperando el que se dé esta transformación legal en México. Desde mi perspectiva (soy abogado y tengo conocimientos en la materia) tengo la especialidad en derecho penal y es un tema que me llama la atención.
La legalización es un tanto complejo a que se refieren con legalización, porque legal es que esté en un cuerpo normativo, lo cual ya está, entonces una cosa es prohibición y otra es legalización. Nunca ha sido prohibido, al menos antes de estas reformas que se han venido dando, no estaba prohibido el consumo de cannabis, eso es imposible de prohibir, porque cómo prohíbes algo que hago conmigo”, enfatiza.
Maximiliano está convencido que cuando sea legal la venta de la marihuana, habrá más seguridad entre quienes la consumen, pues ya no se verían en la necesidad de acudir a un sitio clandestino para comprarla, además de los beneficios económicos que traería para el país la siembra controlada de la planta, como ya sucede en otras partes del mundo, como Holanda o algunos lugares de Estados Unidos.
Por lo pronto, el negocio de Maximiliano marcha viento en popa, aunque cree que cuando se legalice la venta de marihuana (está convencido de que así será) marchará mejor. “La gente que es fumadora, siendo ilegal fuma, viene a comprar las pipas, siendo legal lo va a hacer, pero creo que mejoraría el negocio”, agrega, al tiempo que afirma que cuando se dé esta cambio legal a la venta podría dedicarse también a la venta de la planta, pero aclara, nunca en la ilegalidad.
bft