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Lluvia García lo apostó todo por instalar su negocio de tacos en un remolque, en vez de tener que pagar rentas exuberantes en un local comercial.
En su pequeña empresa, llamada Tacos San Pascualito, la licenciada en Gastronomía busca deleitar el paladar de sus clientes, a través de uno de los platillos favoritos en México: los tacos de arrachera.
“Decidí apostar por algo más pequeño y más versátil como un remolque, así podemos cambiar de zona cada vez que lo creamos conveniente. Inicié con esta microempresa el año pasado y a la gente le ha gustado mucho. Creo que los tacos son un platillo que no decepciona a nadie y podemos comerlo más de una vez a la semana”, comenta la emprendedora.
Inicio
Desde que terminaron su licenciatura en Gastronomía, Lluvia y su pareja, Ulises Ramírez, se dedicaban a preparar banquetes para bodas, bautizos y todo tipo de evento social; sin embargo, dejaron en pausa ese proyecto para registrar su marca y realizar los trámites necesarios en la entidad.
Con el tiempo, Ulises inició un negocio de cerveza artesanal y, posteriormente Lluvia comenzó con un nuevo proyecto gastronómico: Tacos San Pascualito, una microempresa bautizada bajo la inspiración de San Pascual Bailón, santo patrono de las cocineras.
“Nos gustó el dicho: ‘San Pascual Bailón, aviva mi fogón’, lo relacionamos con nuestro amor a la comida”, explica Lluvia.
Lo primero que la emprendedora tomó en cuenta antes de arrancar con su pequeña empresa fue el lugar en donde iba a instalar su nuevo negocio de comida. De inmediato, notó que las rentas de un local en el Centro Histórico de la ciudad no costaban menos de 10 mil pesos, por lo que decidió apostarle a la comida tipo food truck; entonces, invirtió en comprar un remolque.
“Comenzamos por comprar el remolque, sí contemplamos la idea de vender en un local, pero las rentas son demasiado altas, están carísimas, entre 15 mil y 30 mil pesos [cuesta] un local en el centro, pagar eso de renta iba a absorber gran parte de nuestras ganancias. Pensamos también en una combi, aunque eso nos representaba también invertirle en piezas, por eso la opción más viable fue el remolque”, destaca la emprendedora.
“Mi pareja y yo somos socios, entre los dos echamos a andar el proyecto, nos hemos ayudado de nuestros familiares, porque queremos gente de mucha confianza, es decir, que nos ayuden a atender a los clientes, somos un negocio 100% familiar”, comenta.
Concepto
Lo que diferencia a Tacos San Pascualito de cualquier otro puesto en la ciudad es la calidad de los alimentos, comparte Lluvia, pue todo lo que ofrecen en esta pequeña empresa es 100% local y completamente hecho en casa por los mismos emprendedores. Cuenta orgullosa que tienen sus proveedores en la central de abastos, para fomentar el consumo local en Querétaro; además, dice: “La carne que manejamos es de primera calidad, nuestra carta fuerte es la arrachera, que no la encuentras en cualquier lado.
“Nuestros tacos son más grandes, no están hechos con la típica tortilla que es muy chiquita; vendemos tacos de cecina y arrachera, dos tipos de carnes que no son muy comunes en un puesto, no es muy fácil de encontrar. Tenemos arrachera, cecina, bistec, chorizo, campechanos y gringas”, agrega.
Problemáticas
Desde que Lluvia García comenzó a trabajar en su propia empresa, el año pasado, lo más difícil ha sido la parte administrativa, hacer que los gastos y las ganancias cuadren: estar consciente de que el primer año será de constantes inversiones sin percibir ganancias sólidas, dice.
También, se enfrentó a otras complicaciones, como decidir el tipo de comida que debía vender y la ubicación para instalarse. En esta etapa, asegura que la participación de sus clientes fue fundamental, pues varios de ellos le dieron su punto de vista y le mostraron sus preferencias.
“Antes pensábamos vender otro tipo de comida, por ejemplo, hamburguesas, pero eso no es algo que puedas comer varias veces a la semana, no se antoja todo el tiempo, pensamos en algo saludable, pero era el mismo escenario, entonces nos decidimos por los tacos: es una comida muy común y que a todos nos gusta. Podríamos comerla varias veces a la semana”, señala.
“Estábamos en la lateral de la Carretera 57, pero a petición de los clientes nos movimos a Centro Sur, ahora estamos en la calle Armando Birlain Shaffler, frente a Central Park y hemos tenido una gran respuesta, nuestros clientes son oficinistas, vecinos de la zona e incluso clientes que vienen desde otras partes de la ciudad para comer aquí con nosotros”, comenta.
Planes a futuro
Entre sus planes a futuro, la emprendedora Lluvia García busca ampliar el número de remolques para que los Tacos San Pascualito se vendan en varias partes de la ciudad. También quiere ofrecer su marca como banquete en eventos sociales y comenzar a vender salsas picantes hechas por ella misma.
“Estamos orgullosos de que todo lo que ofrecemos en Tacos San Pascualito son productos naturales, caseros y locales, queremos que se vendan en todas las presentaciones posibles”, comenta la joven.
cetn
