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Alejandro Rivera es un queretano que decidió convertir su hobby en su sustento de vida tras una serie de problemas que el estrés y el ajetreo de la vida laboral dejó en su salud, dando así vida a Punto Medio, una cervecería queretana que ofrece cerveza artesanal de calidad y con ingredientes poco comunes.
Cervecería Punto Medio es como denominó a este proyecto, un nombre que va más allá de una marca, pues Alejandro detalla que es un constante recordatorio del balance que debe de haber entre la vida laboral y la vida personal, para evitar que la salud se merme.
“Para mí el proyecto de Punto Medio va más allá de ser solamente un proyecto cervecero, es un proyecto de vida. Anteriormente me dedicaba al área de finanzas y banca de inversión, y después de unos giros inesperados que dio la vida, donde llegué a un punto de agotamiento y de burnout (desgaste profesional), me tuve que replantear lo que realmente quería hacer en la vida. Me enfermé, me diagnosticaron epilepsia y entonces en ese momento el médico me dijo: ‘tienes que cambiar tus hábitos’ y para mí fue como si me dijera: ‘tienes que renunciar’”, relata.
Desde seis años antes de tomar la decisión de renunciar y empezar de cero, Alejandro ya fabricaba cerveza de forma casera como un pasatiempo que compartía con sus amigos, una pasión que surgió tras un tiempo de vivir en Bélgica en un intercambio académico mientras estudiaba la universidad, donde asegura que “le abrieron los ojos” a nuevos estilos, sabores y aromas.
Al regresar a México comenzó a buscar cervezas que le ofrecieran la experiencia que había vivido en Bélgica en cuanto a sabores, olores, texturas; sin embargo, afirma que en ese momento no existía un producto que lo ofreciera, lo que lo motivó a comenzar a “cocinar” su propia cerveza en casa.
Fue así que decidió meterse a estudiar, tomar cursos con cerveceros, ver videos en YouTube y buscar información para comenzar a cocinar su propia cerveza, por lo que, cuando la vida lo puso en un punto en el que tenía que replantearse el futuro, optó por “voltear hacia lo que más me gustaba, que es la cerveza”.
“Punto Medio es para mí un recordatorio y es un mensaje que queremos comunicar a todos los consumidores y a toda la comunidad de cerveceros y amigos, que consumen o no consumen cerveza, pero que son parte de nuestra comunidad: buscar ese balance, ese equilibrio entre nuestra vida personal, laboral, familiar, espiritual, etcétera, y entender que no todo es placer, no todo es trabajo y siempre hay cosas que tienes que hacer que te gustan y no te gustan, pero hay que buscar ese balance”, apunta.
Además de ser este recordatorio personal, el nombre también se ha convertido en un mantra que aplican en los productos que fabrican, pues señala que la firma cuenta con una gran variedad de estilos que van desde cervezas claras hasta muy oscuras, cervezas dulces y cervezas muy amargas, pero siempre garantizando que cada estilo se apegue a lo que debe de ser, “sin irnos a un extremo de hacer cervezas extremadamente alcohólicas que no te puedas tomar más de una porque te emborrachaste, pero tampoco hacer cervezas estilo ultra que son cervezas rebajadas sin mucho sabor.
“Nosotros abarcamos este espectro de sabores y colores con cervezas apegadas a estilos clásicos con un porcentaje de alcohol bajo, entre 4% y 5% tradicionalmente, y que le dé a la gente ese conocimiento de que la cerveza artesanal está llena de carácter y que no nada más es una cerveza a la que mucha gente piensa que sólo se le agregan frutas o ingredientes alternos, sino que puede ser algo muy clásico pero muy bien hecho”, asegura.
Punto Medio ofrece cuatro estilos de línea, es decir, cerveza que se tiene disponible durante todo el año, empezando con una lager estilo pilsener, la cual señala que es la más similar a la que se encuentra hoy en el mercado mexicano; una cerveza ipa pero en una versión un poco más ligera que la ipa regular; es decir, que tiene el balance de amargura y aroma pero sin llegar a niveles de alcohol tan altos.
Otro de los estilos que ofrece es una cerveza ámbar, estilo ámbar americano con maltas caramelo, lúpulos cítricos, refrescante; finalmente, la cuarta cerveza de línea es una stout, la más ligera, con notas tostadas con sabor a chocolate, cacao y café.
Adicionalmente, Punto Medio cuenta normalmente con dos o tres cervezas de temporada, las cuales generalmente están en barril, sin enlatar, así como algunas colaboraciones como la que hoy tienen en producción a base de grillos, la cual se trabajó en conjunto con Santena, una empresa que fabrica alimentos a base de insectos, y con Cerveceros Arellano que también se distingue por fabricar cervezas con ingredientes poco comunes.
La Grilla, como se llama esta cerveza en colaboración, es un producto de temporada que salió al mercado este mes y que estarán ofreciendo en bares y centros de distribución de Querétaro, Guanajuato y Ciudad de México.
“Son cervezas donde nos permitimos experimentar un poco más, usar ingredientes alternos, técnicas que no acostumbramos, o irnos por estilos menos comerciales, pero sin olvidar esto que nos rige, que la cerveza debe seguir sabiendo a cerveza y no nada más al ingrediente que vayamos a utilizar”, abunda.
Otro de los productos que han utilizado para la fabricación de cerveza es el garambullo, fruta endémica que se encuentra en muchos municipios de Querétaro y que dio por resultado una cerveza rosa.