Cual agentes secretos, los integrantes del equipo de producción de Spectre, nuevo filme de James Bond, vigilaban las redes sociales de quienes trabajaban con ellos y lograron atrapar al menos a una decena de personas que filtraban información del rodaje.
Las víctimas fueron extras, personas contratadas para interpretar a gente que iba en la procesión de Día de Muertos que enmarcó la escena rodada en la ciudad de México.
“Subían datos, fotos o video de lo que estaba haciéndose en el set, los rastreaban y al día siguiente ya no regresaban”, cuenta un extra.
A otros los llamaban a la oficina y junto con ellos, analizaban la situación de lo escrito en las redes, de tal manera que quedara clara la decisión por parte de la producción.
A esto, tuvo que agregarse la deserción de algunos contratados que no aguantaron las jornadas de hasta 12 horas (los llamados eran a las 4 de la mañana en Tlatelolco) y el clima.
Para el jueves, había varios extras nuevos y los coordinadores debían repetir constantemente las órdenes, para evitar problemas.
Ese día, también, ante un mal cálculo, la comida no alcanzó. Muchos extras se quedaron sin alimentos durante la hora destinada para ello, teniendo los encargados que resolverlo de inmediato. “Ese día fue el más cáotico de todos, también muchos terminaron en el médico por cansancio y gastritis”, apunta otro extra entrevistado.
La tensión llegó a tal grado, que entre la gente contratada hubo pleitos. Cuando se supone que despega el helicóptero en que pelea el 007 con el villano, un extra-stunt gritó a una persona, lo que causó molestia.
“¡Todos somos iguales, no tienes por qué creerte más!”, comenzaron a decirle; una joven intentó defender a a la insultada y, al día siguiente ya no fue vista en el set.
“Manejar extras no es fácil, menos mil 500, es un trabajo duro, de pronto hay que tomar ciertas medidas”, dice un integrante de la producción.
Sin Craig. Ayer los stunts de Bond y el villano continuaron su pelea en el helicóptero, filmada en la explanada del Zócalo capitalino.
La acción comenzó a las 9 de la mañana y concluyó pasado el medio día, con los dobles de acción de Daniel Craig (quien ya abandonó México) y Alessandro Cremona.
El helicóptero donde peleaban era seguido por otro, con la cámara en una burbuja blanca para filmar la trayectoria de la nave.
En Chiapas, no saben. Hasta ayer por la tarde, en las oficinas de cinematografía y de turismo de Chiapas, aún desconocían la llegada de Spectre a la entidad. El lunes el productor del lado mexicano aseguró que para evitar accidentes, algunas piruetas aéreas serían rodadas en el aeropuerto de Palenque, inmueble con pocas actividades en la semana.
La responsable será la segunda unidad del filme, sin la presencia de Sam Mendes, el director.
“Lo que sabemos es por los medios”, dijo Víctor Lenin Alegría Sánchez, director de cinematografía del estado sureño.
