No es necesario que viajes miles de kilómetros para tener una experiencia gourmet internacional, ya que podrás encontrar la tradición, el aroma y el sabor de una original salchicha alemana en Querétaro.
El Oso Berlin es un concepto que nace en 2014 cuando la pareja de esposos Fabián Wolfgang y Mónica López— residentes en ese entonces de Alemania—, deciden mudarse a México. Previo a su llegada, piensan en ideas para fundar un negocio redituable en tierras queretanas.
“Algunos amigos nos contaron acerca del Festival de Comunidades Extranjeras, habían visto que se vendían muy bien las salchichas alemanas. Mi esposo no es carnicero, pero se puso a trabajar con un vecino que sí lo era para aprender”, relata Mónica.
Al llegar a México, comenzó la travesía e iniciaron con la tradicional salchicha bratwurst, también conocida como salchicha blanca. Es la más típica de la región y suelen utilizarla para asar en comidas familiares o reuniones con amigos.
La respuesta de los comensales fue inmediata; jóvenes que habían tenido la experiencia de viajar e incluso, alemanes que se encontraban de visita en nuestro país, notaron que la receta era 100% original, les parecía como si estuvieran degustando nuevamente este platillo sentados en los parques de Berlín.
En abril de 2014, El Oso Berlin abre sus puertas en Ignacio Pérez #21 en la Colonia Centro, en un local un tanto pequeño, en el que contaban con servicio de barra de ensaladas, más guarniciones como pastas y papas.
“Era un proyecto piloto, aún estábamos viendo qué le gustaba a la gente, ahí fue cuando empezamos a incorporar otro tipo de salchichas como la brava que tiene un toque de picante y la gourmet, con jitomate seco, hierbas y queso parmesano”, dijo Fabián.
Actualmente, el local de la zona centro fue convertido en su lugar de producción, y debido a que la demanda de los clientes ha crecido a pasos agigantados, en agosto del año pasado se mudaron a Juriquilla, dentro de la plaza comercial de Superama, Santa Fe.
El establecimiento aún cuenta con el sistema de fast food, pero para finales de junio, planean abrir un restaurante más grande en el que familias, amigos o parejas, puedan acudir a disfrutar de un buen rato amenizado con música o viendo los partidos de futbol en las pantallas.
El Oso Berlin se ha caracterizado, además de su calidad y sabor, por un ingrediente especial e inigualable: la salsa curry, un preparado casero, por supuesto de receta alemana, el cual utilizan para bañar la salchicha. Otra variedad tradicional que puede disfrutarse aquí es el fleischkäse, una especie de pastel de carne comprimida, relleno de queso.
Con el paso del tiempo, el menú sigue complementándose, ya que Mónica se encuentra estudiando un diplomado en una universidad alemana, por lo que ella y su esposo viajan constantemente a dicho país, pero mientras ellos están un tanto lejos, Luis Granados, gerente, se encarga de atender a los comensales con lujo de detalle.
“Venir a El Oso Berlin es una experiencia única, los productos que ofrecemos son típicos y va a ser muy difícil que los encuentres en otro lugar con la misma calidad y sabores clásicos que ofrecemos”, finalizó Luis.