A su corta edad Silvana Zanella Vargas Lugo goza de una reputación impecable en el mundo de los pasteles, postres y demás delicias. Es originaria de Querétaro, tiene 28 años de edad, y después de recorrer París, Argentina, Nueva York, España e Italia, abrió en Querétaro su propio negocio.
Acabando la preparatoria, a los 18 años, viajó a París con la intención de estudiar en el colegio L'atelier des, tiempo después regresó a la ciudad de Querétaro en donde estudió Gastronomía en el Instituto IGES.
Continuando con su ideal de conocer el mundo y prepararse, viajó a Buenos Aires, Argentina, en donde estudió chocolatería. Después decidió que necesitaba especializarse en lo que más le gustaba del ámbito de la repostería y se inscribió en dos Institutos diferentes: The Culinary Institute of America e Institute of Culinary Education para cursar repostería y decoración en Nueva York.
En el Instituto Bell Art de Barcelona, España, realizó un curso de nuevas tendencias en postres; al regresar a México decidió trabajar desde casa realizando pedidos especiales, poniendo en práctica lo que durante años había estudiado. Silvana siempre ha trabajado con la doble intención de ganar dinero para que su negocio crezca pero también para continuar actualizándose con cursos en el extranjero.
En uno de sus últimos viajes de estudio —hasta ahora—, acudió a Florencia, Italia, en donde conoció al Chef Simoné de Castro, quien le ofreció trabajo en su negocio “Fedora Pastelería” convirtiéndose en guía y master de Silvana. Cada año en octubre acude al James Bear Foundation en la ciudad de Nueva York, en donde sólo los mejores chefs del mundo son invitados a cocinar.
Para comenzar a formar su sueño en grande, la repostera abrió desde hace año y medio las puertas de “Silvana Zanella Pasticceria”, ubicada en avenida Universidad, proyecto que mezcla conceptos newyorkinos y europeos, en donde el punto focal son los pasteles de boda y temáticos.
Siendo maestra, durante dos años de la carrera de gastronomía en la UNE, decide incorporar a sus alumnos más destacados al negocio. La pastelería tiene como regla principal ser 100% natural, utilizan ingredientes como chocolate belga, saborizantes no artificiales y por su puesto rechaza los productos prefabricados, todo es creado dentro de su cocina y con el mejor sabor.
