Cuando de comer se trata, El Caserío resulta una excelente opción, ya que es un restaurante que se caracteriza por su cocina regional española, además de ofrecer platillos de la comida mexicana, europea y americana.
El menú que brinda a sus comensales está divido en dos cartas, una en la que se incluyen las recetas clásicas de El Caserío, y la otra que es variable cada seis meses acorde a las temporadas del año.
La especialidad de este lugar es el “lechón estilo segoviano cocinado al horno” y el “róbalo en salsa verde a la koskera”, un platillo de preparación vasca.
El método de preparación
Para elaborar el “pescado a la koskera” son necesarios 300 gramos de filete limpio salpimentado. Una vez en reserva, la preparación comienza con un rubio, una técnica para generar un espesor en una salsa a base de fécula de maíz o harina, con un poco de ajo y grasa, que puede ser aceite o mantequilla.
En esta primera parte, con la que se logra un color dorado que ayuda a que la harina y el ajo no se sepan crudos, se vierte en un caldo de pescado elaborado a base de huesos.
Posteriormente, se vierte el pescado dentro del caldo y, una vez que tome color, se voltea y se integra un par de almejas chirlas, chícharos, un huevo cocido partido en cuatro y unos espárragos.
Antes de incorporar el pescado, es importante agregar a la salsa bastante perejil recién picado para dar color al pescado.
En cuestión de maridaje
En cuanto a bebidas, el vino de mesa es lo que principalmente se consume en el lugar; sin embargo, para acompañar este platillo, la recomendación que hace el empresario restaurantero Sergio Salmón, es un vino blanco seco, no dulce.
Para la preparación de un martini seco se utilizan tres medidas, dependiendo del tamaño de la copa. “Si tenemos una copa de tres o cuatro onzas, yo recomendaría una medida de martini extra seco, más dos onzas de ginebra de preferencia de la de mejor calidad. Esto se pasa al agitador y, una vez que se vierte en la copa, va con tres aceitunas y para lograr un martini seco sucio, sólo se agrega un poco del agua de las aceitunas”, refiere Salmón.
Dentro del mismo espacio, se ubica el Faz, un bar especie pop con música en vivo los viernes y sábados y una carta más casual con platillos gourmet tipo snacks. Así como el QBO Centro de Espectáculos, en donde se presentan artistas, comediantes, stand up show comedy y algunas obras de teatro.
“Con estos tres conceptos lo que buscamos es que las personas que asistan a comer pasen al bar y si es posible al centro de espectáculos, en donde la podrán pasar increíble de las 2 de la tarde a 02:00 de a mañana”, reitera Sergio.
Aunque el lugar está dirigido a atender a hombres de negocios, conforme va pasando la semana, se vuelve más familiar, de grupos de amigos y de parejas.
Con la intención de que los papás también disfruten de un momento agradable, este espacio cuenta con el servicio de niñeras para atender a los pequeños ya sea en el área de juegos o de televisión, en donde pueden ver películas.
Desde hace algunos años, El Caserío también lleva a cabo catas maridaje para empresas en particular o para laboratorios, mismas que han sido todo un éxito.