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La jazzista Liliana Vélez ha grabado un disco de jazz es su carrera, reconoció que producirlos es cada vez más difícil, pero es necesario seguir grabándolos.
“No es fácil, pero es una empresa que nunca tiene que acabarse, porque el músico es lo que puede hacer, producir un disco, además de dar un concierto en vivo”, dijo a EL UNIVERSAL Querétaro.
Es considerada como la mejor rockera de los jazzeros mexicanos y fue parte del Festival Internacional de Jazz de Verano en Querétaro, recién concluido, y donde la mexicana se presentó acompañada de su Lili’s Jazz Monsters.
“Mi novio dice que canto el jazz como rockera, eso es lo que hago, nunca dejo de cantar como rockera”, contó.
La cantante destacó el nivel artístico del festival anual de jazz de Querétaro, organizado en colaboración con las autoridades culturales de Quebec, Canadá.
“Me parece que hace una labor increíble que hagan un festival de jazz en Querétaro y donde sea, porque la verdad es que aprendemos mucho de los músicos que vienen”, declaró. Liliana Vélez nació en Culiacán, Sinaloa, en 1971 y desde muy pequeña manifestó su gusto por el canto. A los 12 años gana en un concurso local de música y el premio fue poder grabar un disco. Fue su debut como cantante.
Durante su estancia en Monterrey, donde vivió la niñez y la adolescencia, se inició en el rock y el blues, cantando covers con sus amigos, quienes más tarde formaría las bandas ya famosas de Kinky y Jumbo. A su llegada a la Ciudad de México, colaboró con la banda de funk, Poncho Kings, fue miembro de la banda alternativa de electro-rock Tanke, con la que participó en el Festival Vive Latino de 2007.
Descubrió el jazz por pura coincidencia, dijo, “yo empecé a cantar estándares para aprender de los jazzistas, pero se fueron abriendo puertas y yo decía, no, yo no soy jazzista, pero por respeto a los artistas y al género, voy a hacer algo con respeto”. Hace tres años grabó su primer disco, I’m just a lucky so…and so!, donde incursionó como compositora, alternando covers de Duke Ellington y George Gershwin.
Dice la cantante que cada vez es más difícil grabar un disco, no importa qué género, pero guarda esperanzas.