Poco antes de las seis de la tarde las vías de Corregidora, Ángela Peralta, Juárez y 16 de septiembre fueron abarrotadas por miles de queretanos y turistas curiosos, que esperaban ansiosamente el espectáculo del recorrido de Catrinas.
Mientras tanto, en el interior de la Alameda Hidalgo, artistas, estudiantes y músicos, entre otros participantes, se alistaban maquillándose, así como afinando sus instrumentos para brindar a la gente una noche llena de magia.
En punto de las 18:45 horas, ya caída la tarde, el grupo de concheros “Raíz viva”, conformado por maestros de distintas áreas, dieron inicio al festejo. Los danzantes bailaron al ritmo de los tambores; enseguida las puertas del recinto se abrieron y se escucharon los aplausos de emoción, por parte del público.
“Precisamente el objetivo del grupo es rescatar nuestras tradiciones y Querétaro tiene muchas, hoy somos parte del inicio de la historia”, comentó Adriana Ríos, integrante de “Raíz viva”.
Además de ser alusivo a la figura de la catrina mexicana, el desfile también hizo referencia a las diversas épocas históricas del país, ya que luego de los concheros, apareció la representación del Virreinato, en la que destacaba la vestimenta colonial con elegantes vestidos, sombreros altos y bastones.
Para ilustrar la Independencia, arribó un carro alegórico bautizado como “El queretano”, detrás de él, apareció el sonido de la banda de viento “Pasión”, que enchinó la piel de los espectadores al son de “Cielo Rojo” y “La llorona”, entre otras melodías alusivas a la fecha.
“Es el primer desfile de este tipo y pienso que es perfecto para nosotros, se nota que está creciendo la cultura en Querétaro”, expresó Israel Romero, vocalista de la banda.
Los rostros de los más pequeños se iluminaron al ver hermosos caballos blancos pintados como si fueran calaveritas de azúcar, montados por imponentes calaveras, quienes iban abriendo camino a la Revolución.
A lo lejos se podían escuchar carcajadas y uno que otro grito, pues los zanqueros de la época post moderna estaban haciendo de las suyas entre los asistentes. Casi para finalizar, se unieron las etapas del Porfiriato, el Imperio y la República, representados con calaveras cabezonas que cargaban letreros que recitaban palabras como “la huesuda”, “la copetona”, “la justiciera”, “la pálida”, entre otras formas coloquiales para nombrar a la muerte.
Los diez integrantes del Mariachi Tenampa le dieron sabor a la velada al interpretar “Fiesta en Jalisco”, compartiendo así el característico entusiasmo de los músicos, que alegró cada una de las calles de la ruta de la caminata.
“Vamos a empezar tocando sones y canciones alegres como “Veracruzano”y “El Cascabel”. El evento está padre porque se remonta a las costumbres de la cultura mexicana. Debemos dejar atrás la idea de Halloween, con esto la intención es que mucha gente aprecie lo que es de nuestro país y no de otros”, dijo el músico José Macías.
Por supuesto no podía faltar la estrella del desfile, la tradicional, emblemática y representativa de la cultura popular mexicana, “La Catrina” que, engalanada con aires de diva, iba sentada encima de una limosina fúnebre con un vestido ampón de color vino y detalles dorados.
Para cerrar con broche de oro apareció una banda de rock, que al son de “La bamba” invitaba a los presentes a reunirse en el Jardín Guerrero, para ahí continuar las festividades del mes de noviembre y dar por terminada la caminata que contó con más de 600 participantes.
Al finalizar el recorrido, casi a las 20:30 horas, agrupaciones como Proyecto cuatro y la academia de baile “Danzania” realizaron distintos números artísticos enmarcados por el tradicional mercadito de Día de muertos.
“Durante el desfile hicimos una serie de improvisaciones, ya en el escenario tenemos algo preparado para este que es el primer evento enfocado a la festividad del 1 y 2 de noviembre. Queremos formar parte de esto y transmitirlo a través de la danza”, concluyó Gretel Segura, representante de Danzania.