La puesta en escena “Pachecas a Belén”, en su adaptación al español, se presentó en el Teatro del IMSS, en donde ofrecieron dos únicas funciones para el público en general, esta gira continuará por el sur del país.
Después de más de 30 años en cartelera, Javier Yépez, en el papel de Severina, Sergio Lazcuaga interpretando a la diabla María Félix, Jorge Caheiro como productor y Blandina, Roberto Cabral como Luminosa, y Jheremy Garrido como el arcángel Gabriel, le dan vida a esta controvertida pastorela.
El telón se abrió en punto de las 8:40 de la noche y un apuesto y seductor arcángel anunció la llegada del redentor, ante las hermanas Blandina y Severina, dos pastorcitas con fieles convicciones y en busca de paz.
Luminosa, hermana de estas pastoras, pero con un carácter y forma de ser distintos, no ha presenciado tal acontecimiento por lo que se niega a acompañar a sus hermanas para ir a conocer al niño Dios.
En un arrebato por querer ser una actriz famosa y teibolera de profesión, Luminosa accede a emprender un viaje hacía Belén con Blandina y Severina, tramando un plan para desviar su andar y llegar a Nueva York para lograr su propósito.
La puesta en escena con tintes de comedia y un claro estilo de “drag queen”, mantuvo atentos a los asistentes, quienes no dejaron de reír con cada una de las ocurrencias e improvisaciones de los cinco actores.
“Hay muchos errores que ya son planeados y que causan mucha risa en el público, pero en esta función sí hubo algunas improvisaciones y eso causa carcajadas en nosotros y por consecuencia en el público, es muy divertido”, destacó Jorge Caheiro.
Mientras que Sergio Lazcuaga explicó que el secreto radica en conocer bien al actor. “Cuando pasan este tipo de situaciones es muy importante analizar a tu compañero, porque como nosotros estamos haciendo esto desde hace muchos años, tu compañero no se puede quedar callado, ni decirte no, te debe dar una réplica”, explica.
Cansadas de tanto caminar y hambrientas, las tres hermanas se detienen en el camino para poder dormir, mientras que Luminosa, la más excéntrica de ellas, aprovecha la oportunidad para fumarse “un churro” y convencer a sus hermanas de seguirla, sin tener éxito.
Como en todas las pastorelas el papel de la diabla no puede faltar, y después de su siesta, las hermanas son tentadas por ella al ofrecerles ropa, fiestas, droga y mucha diversión para no llegar a adorar al redentor.
Envueltas en una verdadera confusión, las tres pastoras tienen que ser protegidas por el arcángel Gabriel para poder llegar a su destino, causando una gran molestia en la diabla María Félix, quien finalmente decide retirarse.
Con carcajadas y un emotivo minuto de aplausos, los actores fueron despedidos por el público, continuando con su gira por ciudades del sur de la República Mexicana.
Para esta segunda función de la noche, el elenco recibió a algunos afortunados fans tras bambalinas para tomarse selfies y la foto del recuerdo.
“El público queretano reaccionó de la mejor manera, aunque en la primera función hubo poca gente, todo fue muy divertido, nadie se espantó con nuestros diálogos algo pesados. Nosotros siempre le devolvemos a la gente un poco de su cariño, si ellos nos buscan para esto, jamás nos negamos”, comentó Roberto Cabral, quien interpreta el papel de Luminosa.