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En agosto, 23 voluntarios de la organización Peace Corps (Cuerpos de paz, provenientes de Estados Unidos, llegarán a Méxic, para participar en diversos proyectos, informó Daniel Evans, director de Peace Corps México.
Educación ambiental, conservación de suelos, reforestación, manejo y monitoreo de vida silvestre son parte de las actividades que realizarán. “Los voluntarios sirven un período de dos años y hacen un trabajo específico relacionado con las necesidades principales del país al que llegan”, explicó Evans, quien también ha participado como voluntario en República Dominicana.
Esta organización, creada en 1961 por el presidente John F. Kennedy, ha trabajado con voluntarios en comunidades de 139 países, incluyendo México, y aquí la oficina central se abrió en 2004 y actualmente se encuentra en Querétaro.
En agosto llegarán los voluntarios a Querétaro y recibirán una capacitación sobre el idioma español, la cultura del país, además de convivir con una familia mexicana, y a partir de noviembre comenzarán a trabajar en las localidades asignadas.
A nivel internacional trabajan en áreas de agricultura, educación y educación ambiental, salud, desarrollo juvenil y pequeños proyectos sustentables. Voluntarios de Peace Corps México trabajan en estados como Coahuila, Guanajuato, Hidalgo, Jalisco, Nayarit, Puebla, Querétaro, San Luis Potosí y Tlaxcala.
En Querétaro, Cuerpos de Paz colabora en conjunto con el Consejo Nacional de Ciencias y Tecnologías (Conacyt), la Secretaria del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, y es a través de estas instituciones que los voluntarios, especialistas en su área, algunos jubilados y otros jóvenes con nivel de maestría, comparten su experiencia y conocimiento.
A través de SEMARNAT, los voluntarios han trabajado en diversos municipios, principalmente ubicados en la Sierra Gorda, en Jalpan, Huimilpan y Querétaro.
Ángel Pineda, gerente del programa de medio ambiente de Peace Corps México, dijo que para los voluntarios que llegarán en agosto se contemplan proyectos para trabajar en los municipios de Peñamiller, Landa de Matamoros y Jalpan.
La aceptación en las comunidades de la Sierra son favorables, añade Pineda, “cuando llegaron los primeros voluntarios había desconfianza, pero eso cambió cuando vieron que el objetivo no tiene ningún fin religioso ni político, sino que vienen a ayudar en las necesidades que se tienen localmente y aprender también”.
La bióloga neoyorkina Jennifer Lowry, quien pertenece a Cuerpos de paz, trabaja actualmente en la comunidad de Santa María de Cocos del municipio de Arroyo Seco, realizando un monitoreo sobre la guacamaya verde que se encuentra en peligro de extinción.
El trabajo de Lowry es un ejemplo del trabajo que en general realizan los voluntarios de la organización, dijo Daniel Evans. Al año se reciben en Peace Corps México tres grupos de voluntarios: un grupo con profesionistas para asignaciones especiales, uno encargado de transferencias de tecnología y uno de manejo sustentable del medio ambiente.
En la historia de Peace Corps se tiene un conteo de 200 mil voluntarios que han brindado su apoyo para 139 países. El objetivo, añadió Evans, es realizar un trabajo en conjunto, compartiendo experiencia y conocimiento, pero además logrando establecer vínculos culturales entre México y Estados Unidos.
Después del período asignado, los voluntarios vuelven a Estados Unidos, pero hay quienes regresan al lugar donde trabajaron como voluntarios, porque a parte del trabajo se crean vínculos de amistad.
