“No cabe duda, cuando menos te lo esperas y has sembrado buena semilla, siempre te irá bien. Esto para mí es un regalo de la vida, un regalo que Dios me hizo favor de ponerlo en frente y yo pues lo aprovecho, pero con los pies bien puestos en la tierra”, expresó José María Napoleón al enterarse que su presentación de hoy en el Auditorio Nacional tiene el letrero de localidades agotadas desde hace varios días.
Es que pareciera que con más de cuatro décadas de carrera artística, Napoleón está viviendo un nuevo despunte como artista, otra prueba de ello es la aceptación que está teniendo su álbum Vive, donde presenta sus éxitos con nuevos arreglos y con la colaboración de artistas como María José, Mon Laferte, Pedro Zapata del grupo Pesado, Yuri, Manoella Torres y su hijo José María Napoleón Jr.
“No me la creo, de repente me digo: ‘no me haré expectativas’, nunca lo hago pero tengo fe de que algo pueda suceder, por eso cuando me ofrecieron el proyecto les dije que muchas gracias, que no, porque yo ya había pasado por mucho y había grabado un disco que no se le hizo mucha promoción, que les agradecía mucho pero que prefería seguir trabajando en el nivel que yo estaba, pero me hicieron otras dos llamadas y pensé: ‘esto ya es algo importante’, y el disco ya es platino más oro”.
Para Napoleón el realizar este álbum fue todo un viaje a la nostalgia, fue darse cuenta que la gente ha hecho suyas muchas de las canciones de su repertorio, y sobre todo ver los momentos importantes que ha vivido.
“Me siento como en mis 26 años, cuando canté ‘Hombre’ en la final de la OTI, cuando canté ‘Vive’ con 25 años y que fue para mí una canción que hasta la fecha sigue emocionando, pasan los años y es un tema que no se queda atrás, es una maravilla”.
El hecho de que otros intérpretes de su generación estén teniendo nuevamente éxito o salgan del retiro donde estaban gracias al público, incluso de nuevas generaciones, no es algo casual para Napoleón por una sencilla razón: el contenido de las letras.
“Los compositores, como es mi caso, somos portavoces de sentimientos y por eso mucha gente se identifica con nosotros, porque los compartimos. Siempre he tratado de hacer mis canciones una diferente a la otra, sin repetirme, para mí es importante entregarle a la gente lo que espera de uno”, expresa el cantante.
Sea cual sea el factor que tiene al intérprete de “Treinta años” tomando su segundo aire, como popularmente se dice, Napoleón se lo toma con calma y lo disfruta, con esa tranquilidad que sólo la experiencia y la sabiduría obtenida por los años puede dar.
“Entre más éxito más humilde me volveré y más sencillo seré en mi vida, porque yo no creo en las personas que sienten que todo se lo merecen, yo le doy gracias a Dios de que me permita estar en este momento, atravesarlo y pasar bien por esta etapa de mi vida que me encaminará hacia mi final como artista, estoy muy agradecido”.
Es por eso que espera con ansiedad pisar el escenario del Auditorio Nacional por cuarta vez, donde volverá a reencontrarse con su público y compartirá el micrófono con algunos de sus compañeros que estuvieron con él grabando su disco de duetos, nombres que prefiere guardar como sorpresa.
“Es una emoción muy grande, me siento muy satisfecho que a esta edad en mi vida, con 66 años, diga: ‘Dios otra vez estoy aquí y tengo la fortuna de conectar con todas las personas. Estoy seguro que me emplearé a más del 100% para poder complacer las expectativas de mucha gente, porque la música es el lenguaje que sólo unos cuantos hablan, pero que todo el mundo entiende”, finaliza el intérprete de balada nacido en Aguascalientes.