Caminando por el centro de Querétaro, Rick Maciel encontró una “guitar Barbie”, ese juguete fue intervenido hasta que alcanzó el sonido de un instrumento real y se convirtió en la pieza principal del proyecto sonoro Halo Between.
Rick dejó su guarida en Querétaro y viajó con todos sus juguetes (dos dinosaurios chiapanecos, un xilófono de plástico, robots, coches y otras piezas intervenidas) a San Francisco, California, para grabar dos discos.
Geppetto musical
El proyecto se divide en dos fases, una es la composición musical y la otra etapa incluye el trabajo de intervención de juguetes rescatados de mercados y basureros.
Otros han llegado a las manos de Rick como regalos mágicos. Ése es el caso de Rickmon y Tayanita, dos dinosaurios de origen chiapaneco que están unidos en el sagrado matrimonio de la música.
“Lo primero que se me ocurrió fue darles vida como Pinocho, no sabía bien cómo pero sabía que lo podía lograr. Mi música está basada en imaginación, le diseñé a cada uno una naturaleza robótica”.
Lo anterior es un prototipo de lo que viene para Halo Between, pues Rick viajará a Chiapas para que los chamulas confeccionen dinosaurios más grandes, y les enseñará cómo sus creaciones tienen vida.
