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Historia de un payaso de la calle

Historia de un payaso de la calle
07/01/2014 |00:00
Redacción Querétaro
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A los payasos de calle también se les llama presentadores, truhanes, merolicos, mentirosos, juglares, saltimbanquis, chantajistas y sanadores. “Y está bien dicho, no hay una manera despectiva, porque somos eso”, explicó Arturo Arias Villa, mejor conocido como El Payaso Ruffo.

Desde hace cuatro años, Arias Villa dirige la Compañía Circo Teatro en Querétaro que ofrece espectáculos circenses con payasos, magos y malabaristas. Se trata de un show de entretenimiento sin animales.

En febrero estrenará dos nuevos espectáculos: Fantasy, de acrobacia artística, y Circo Cabaret Ja Ja, una mezcla entre cabaret y artes circenses.

En la compañía, integrada por una decena de personas, todos hacen de todo: actúan, ponen la utilería, acomodan a la gente y salen a gritar a la Plaza de Armas y la calle Corregidora para atraer al público.

Arias Villa se dedica al arte de entretener a la gente desde hace 12 años. “Soy lírico completamente, me hice en la calle”.

Desde los 12 años dejó su casa. A los 15 estudió danza, misma que lo llevó al teatro y la pantomima que “se me hace genial, pero yo tenía más necesidad de expresar más cosas, de decir cosas con mi cuerpo”, dijo.

Un payaso callejero

El personaje de este hombre de 42 años es un payaso de la calle. “Soy lírico completamente”.

Durante muchos años trabajó de plaza en plaza, burlando inspectores y juntado gente para que los merolicos pudieran vender sus productos.

“Mi carrera la empecé con los merolicos, yo era el payasito que les juntaba a la gente para que vendieran sus yerbas, sus magias o chicles de purga y todas esas cosas”, declaró.

“Eso hacíamos, juntábamos a las personas, traía mi monociclo, mis malabares, mi nariz y una gabardina que es la que siempre uso”, recuerda.

Asegura que siempre quiso ser algo más que un payaso de pastelazo “y esas cosas, expresar un poquito más las capacidad del cuerpo”.

Dónde buscarlos

Actualmente, la Compañía Circo Teatro en Querétaro, ubicada en el Centro Histórico, presenta un show con los mejores espectáculos del 2013, en donde destaca el personaje de El Zorro y la llamada Rueda Alemana y Mr. William, el animador del show, entre otras cosas.

Para más señas, en Plaza de Armas se pueden encontrar personajes disfrazados de payasos o animales que invitan al público al espectáculo. No es truco. Es un circo de verdad.

Arturo Arias es el director de la compañía, pero también actúa y, cuando se requiere, hace de gritón en plaza de armas invitando a las personas a presenciar este espectáculo. De ahí venía antes de ofrecer esta entrevista. “Y escribo, produzco, actúo, hago de todo”, indicó.

Desde hace 17 años este personaje se quedó a vivir y trabajar en la ciudad de Querétaro. Antes de eso sólo era una capital de paso en la giras entre la Ciudad de México y los espectáculos que ofrecía en el Bajío.

De Querétaro le gustan sus habitantes, “vemos que es un lugar limpio, que la gente es sana de corazón, que no tiene esa maldad de ciudades grandes, que no buscan chingar”, señaló.

Lo único que no le gustó tanto del lugar es la falta de unión en el gremio de payasos y teatreros de la ciudad, ya que “cuando yo fundé este espacio, para mi sorpresa en lugar de unir a la gente, la dispersé”, reconoce.