La soprano María Anaya es una joven de 20 años que descubrió su verdadera pasión hace seis años.
Hija de padres expertos en danza. Es queretana de nacimiento y tiene un gran amor a su ciudad natal en donde comenzó a asistir a clases de canto y creció junto a su familia. Actualmente, estudia en el Conservatorio Nacional de Música (CNM) en la ciudad de México.
María Anaya Salgado confesó a EL UNIVERSAL Querétaro sus vivencias dentro de la música, así como sus sueños personales y profesionales.
Desde muy pequeña acompañaba a mis papás, Juan Francisco Anaya y María Salgado, a sus giras artísticas. Ellos se dedicaban a la danza profesional y fue como inicié en el mundo del arte. Ingresé a una compañía de baile y, aún cuando disfruté por tres años, me di cuenta que eso no me apasionaba. Poco tiempo después, a mis 14 años, decidí intentar el canto e ingresé a la Casa de la Cultura en Querétaro.
Para ingresar a la casa de la cultura, el maestro Librado Alexander Anderson, un distinguido tenor mexicano, debía aceptarme y para eso necesitaba una audición. Fue complicado porque apenas tenia 14 años, practiqué durante meses y estaba muy nerviosa en el momento de la audición.
Pensé que no me aceptaría ya que no me hacía ningún comentario sólo más pruebas, pero, para mi sorpresa, le encantó mi voz y me dio la oportunidad de empezar a educarla con sus enseñanzas.
Es la vía por la que una puede hacer un cambio en todos los aspectos. Actualmente estoy en un proceso de encontrar mi propia música, la cual debe salir desde adentro, sentir cada nota para transmitirla de la forma en que queremos.
En la música, las personas depositan sus anhelos, tristezas y emociones en nosotros, ya que se identifican con cada tema.
Debido a esto hay que sentir cada momento para que los demás también lo puedan sentir.
He aprendido muchas cosas nuevas y a darle un nuevo sentido y dirección a lo que quiero lograr.
En estos momentos estoy estudiando Bell Canto, una técnica muy antigua italiana que tiene diferentes aspectos. La madurez en la voz se alcanza hasta los 30 años y estoy en el proceso de definir el estilo de soprano que seré. Actualmente mi tesitura es soprano ligero por mi edad y por los tonos que alcanzo.
Me he involucrado también en el teatro, ya que es un complemento de mi carrera, Además, me ayuda a relajarme y también a divertirme.
Tengo mis metas a corto y largo plazo. Me gustaría, en este año, tomar diferentes cursos, darme a conocer más por medio de concursos y proyectos. Lamentablemente existe muy poca difusión y oportunidades de becas para ir al extranjero y darte a conocer. Quiero continuar conociendo gente y ampliando mis horizontes y llegar a otros continentes.
Me gustaría estar en Alemania, ya que tiene un mejor nivel, en donde realmente te enseñan a hacer música para poder llegar a tocar al público con mi voz.
En noviembre del 2012, fui parte del coro de la compañía de pro ópera, montamos la obra Le Comte Ory, de Rossini.
Fue una experiencia muy grande ya que trabajé con profesionales, talentos jóvenes que están teniendo mucho éxito en el extranjero como Estados Unidos y en Europa.
Fue un gran trabajo en equipo, pude aprender técnicas desde cómo se monta una ópera, qué se necesita y también cómo estudiar una obra completa.