erika.monroy@eluniversal.com.mx Jaqueline Bracamontes dice que no tiene miedo de volver a intentar embarazarse y que hasta ahora ha tenido que madurar a base de trancanzos. “La maternidad es algo que me cambió la vida, cada vez que estoy con mi hija y platico con ella me siento tan bendecida, que cualquier otra cosa que tenga que venir será cuestión de Dios”, comentó la actriz y conductora. Ante los cambios que la producción de Miguel Ángel Fox, ya tiene preparados para la tercera temporada de La Voz México, la única constante será Jaqueline Bracamontes, quien repite en la conducción de la emisión. Según el productor sus deseos de cambiar de conductora en cada temporada del reality show se esfumaron al reconocer que el trabajo realizado por la estrenada mamá unió a la producción y la convirtió en una familia. “Jackie es como la mamá de este programa, porque con su sensibilidad logró que todos los integrantes se unieran, además creo que le aporta otra imagen a la emisión”, comentó Fox. Aunque Fox ya había decidido cambiar de conductor, se arrepintió y volvió a buscar a Bracamontes. “Me dijo que no conduciría este año el show y por mí no hubo problema, porque así podía dedicarme a mi nena, pero cuatro días después me llamó y me dijo que siempre sí”, narró. Jaqueline Bracamontes estará acompañada de Lidia Ávila, quien será la encargada de compartir aspectos del detrás de cámaras durante la emisión y convivirá con los participantes. “Es una cuestión de empatia, porque me recuerda que yo también estuve en su lugar, pidiendo una oportunidad, audicionando”, explica la cantante. Ambas buscarán mezclar sus estilos y mantener un ritmo constante ante los cambios que ya tiene preparada la producción.