Recetas de chile en nogada hay infinidad. Sin embargo, el platillo preparado por primera vez el 28 de agosto de 1821, es la que ha servido de base principal para la inspiración de todos los cocineros que la elaboran. Y aunque existen varias versiones de su origen, lo cierto es que por estas fechas está presente en las mesas más exquisitas del país.

Marcela Briz, una de las propietarias del restaurante El Cardenal, año con año pone en práctica la tradicional receta para compartir con los sibaritas y amantes de la buena mesa.

“Nuestra especialidad es una ardua investigación de varios años. Sin embargo, se ha ido modificado de acuerdo a la consulta de libros antiguos, hasta lograr la más apegada al siglo XIX.

“Por ejemplo, el relleno lo elaboramos con carne de res y cerdo, finamente picadas. En cuanto a la nuez, ésta debe ser de la mejor calidad, además de fresca, por ello aprovechamos su temporada que es del 1 de agosto hasta mediados de septiembre”, detalla Marcela.

Añade que otro de los ingredientes primordiales es la granada, la cual debe tener un color rojo fuerte , además de ser jugosa para hacer perfecta sintonía con la nogada.

SABIDURÍA CULINARIA

El apreciado chile en nogada representa el mestizaje de la cocina mexicana, donde se plasman los colores de la bandera nacional.

“Es un plato elegante y de sabores muy sutiles, que gracias a la gran variedad de frutas de temporada brinda toda una armonía al paladar, por lo que se tiene especial cuidado en la selección de los duraznos, que sean de la ciudad de Puebla, así como las dulces peras, los perfumados piñones rosas y el acitrón.

“Es una especialidad que sólo se comen una vez al año, por lo que hay aprovechar los ingredientes que son de temporada y poner énfasis para disfrutarlo, por ello recomiendo acompañarlo con una buena copa de vino”, expresa la propietaria de El Cardenal.

“Hay quien lo acompaña con champaña, aunque también pueder ser un vino blanco de uva chardonnay con un poco de barrica seco o un tinto shiraz reposado en barrica”, explica Briz

UN FINAL GOLOSO

Para Marcela, el deleite del chile en nogada se puede ver coronado con la degustación de un buen postre para lograr un perfecto equilibrio de sabores.

“Para ello, recomienda algo ligero como una bola de nieve o hay quien termina con un buñuelo pequeño acompañado de dulce de guayaba con un poco de nata y con un jarrito de café de olla.

“Lo importante es disfrutar de toda la mezcla de sabores que encierra esta especialidad, así como de hacer un agradable momento y una convivencia familiar”, finaliza Briz.

Google News

TEMAS RELACIONADOS