Para Rocío Soto el dibujar es una práctica natural. Desde que era niña, relata a EL UNIVERSAL Querétaro, le encanta realizar esta actividad. “Siempre he cargado cuadernitos, el primero me lo dio mi abuela, ahí empecé a escribir y dibujar mucho, son más de 30 libritos donde he plasmado ideas, emociones y todo ese ruido que uno trae en la mente”.
Y son precisamente esos ruidos de la mente los que Rocío expone de manera gráfica en el Museo de la Ciudad. “Son los pensamientos transformados en algo gráfico, alguien podría sacar sus pensamientos en música, en gritos o en movimientos del cuerpo. En mi caso, como todos mis pensamientos los veo gráficamente, los trasporto de inmediato a un papel, a una historia, a una línea”.
La primera exposición individual de Rocío Soto se ubica en la que también es oficina de Gabriel Hörner, director del Museo de la Ciudad. Ahí, aunque el directivo esté trabajando, los visitantes pueden pasar con total libertad a ver el mural de la artista, una obra que simula la expansión del ruido.
También se exhiben los sketchbooks, en donde se retrata las distintas formas y etapas creativas.
Cuadros en formato pequeño que reflejan todos esos ruidos, murmullos y preocupaciones sonoras de la artista. Y esos trazos se han convertido en joyería, que también forma parte de la muestra.
El color negro predomina en “Ruido en la mente”, la joven artista explica que el trabajo en una sola tinta le resulta muy cómodo. “Es de esas veces que empiezas a dibujar sin levantar la pluma o el lápiz, como una madeja de estambre que vas jalando poco a poquito y que el cambiar de color no es necesario sino continuar con el dibujo. Creo que también tendría una alusión con la arquitectura el que sea monocromático y abstracto”.
Antes de la arquitectura
Rocío Soto es egresada de la Escuela de Diseño y Arquitectura del ITESM, Campus Querétaro, además es la primera mujer que ha recibido el Premio Nacional a la Composición Arquitectónica Ing. Alberto J. Pani, edición XXII, otorgado por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Realizó estudios en la Facultad de Arquitectura del Politécnico de Torino; Historia del Arte en la Universidad de Valbonne Niza y Joyería Experimental en Saint Martins College of Art and Design en Londres. También creó la marca de joyería Burdo. Y en 2009 co-funda Malva, un estudio dedicado al interiorismo y arquitectura.
“Soy arquitecta y ese es mi trabajo como tal, pero siempre encuentro tiempo para el dibujo, es algo que permanentemente hago, desde antes de que existiera la arquitectura en mi vida. Durante la carrera, y posterior a ella, siempre las ideas han partido de los sketchbooks, la joyería, la arquitectura, todo siempre se ha originado del dibujo y, bueno, eso es algo permanente y natural en mí”, agrega Soto.
Durante 2012 participó en la exposición colectiva “Blanco de titanio- Blanco de Zinc” del taller de pintura impartido por Rafael Rodríguez. Para el 2013, en colaboración con el artista Nando Murio, expone en Kulturnatta, Gotemburgo, Suecia. Y “Ruido en la mente” estará en exhibición en el Museo de la Ciudad hasta junio.