Vida Q

Cata con un gran sabor de boca

Realizan cata de whisky y tequila, maridados con deliciosos canapés que crearon una ola de sensaciones al paladar.

Julio César Páez Galindo guió a los invitados por una experiencia llena de sabores, mostrando la manera idónea de combinar los destilados con deliciosas recetas (FOTOS: GONZALO IBAÑEZ. EL UNIVERSAL)
09/08/2017 |03:01
Redacción Querétaro
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Se llevó a cabo una exclusiva cata de tequila y whisky a la que asistieron aproximadamente 45 personas, en El Palacio de Hierro, donde los invitados degustaron destilados de alto nivel en el área gourmet de la tienda departamental de Querétaro.

Julio César Páez Galindo, embajador de una marca de destilados premium, fue el encargado de ofrecer la cata para invitar a la gente a vivir una mágica experiencia, con la finalidad de aprender a fondo sobre las bebidas y así poder compartirlas en sus reuniones.

Para iniciar con el evento, se ofreció un whisky añejado durante 15 años en barricas de roble europeo, en el que se encuentran características de sabores y olores muy especiales de madera y barricosos, el cual se maridó con quiche lorraine, una receta francesa de huevo con tocino, además de un montadito de sardina con queso de cabra y un toque de aceite de trufa.

Como segundo destilado, se sirvió un whisky que se denomina como extra deluxe, con 18 años —como mínimo de añejamiento— en barricas de roble europeo, con sabores distintivos como jerez, mermeladas, cremas, con notas sedosas y ahumadas, que fue acompañado de New York cheesecake y un montadito de pan tomate con lomo dorado y un toque de arúgula.

Durante el evento, los invitados también disfrutaron tres proyecciones de las marcas que se presentaron, además de un foro de preguntas y respuestas con el embajador, quien destacó una frase habitual entre los whiskeros “un buen whisky con un buen amor, es perfecto a los 18 años”.

Por su parte, Marianela Hernández, gerente de Relaciones Públicas de El Palacio de Hierro, comentó: “Para nosotros es un honor poder tener este tipo de catas y consentir a nuestros clientes para que encuentren una experiencia única. Realizamos estos eventos con distintas especialidades como tés y chocolates”, aseguró.

Para cerrar con broche de oro, se sirvió un helado de chocolate con mermelada de naranja y ceviche yucateco con un toque de mango. Ambos maridados con tequila con intenso sabor a agave, extra añejo —con tres años de añejamiento en barrica de roble americano— obteniendo así sabores fuertes de piña y ligeros de cítricos; dejando a los clientes con el mejor sabor de boca y una experiencia única.