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En el corazón del Centro Histórico, a unos pasos de las vistas arquitectónicas más hermosas de Querétaro y ubicado sobre la calle de Madero, existe un pequeño y acogedor espacio creado para disfrutar de un buen café, una bebida refrescante, o bien, un delicioso panini.
Inspirado en las tradicionales cafeterías europeas, este lugar busca romper con la rutina del trabajo, ofreciendo un momento de tranquilidad y reflexión a quien lo visita; todo ambientado con una exclusiva decoración retro y excelente música.
“Estuve viajando seis meses por Europa y me llamaba mucho la atención que en los centros de las ciudades, la gente se concentraba en los cafés para convivir, y comencé a tomar ideas para crear el concepto de una cafetería. Al llegar a Querétaro vi la oportunidad de este local y decidí empezar el proyecto”, comentó Santiago Alcocer, y compartió que su gusto por el aroma y sabor de esta bebida fue lo que lo motivó a arrancar con este negocio.
Al entrar a “Café Pal Diario” su acogedor espacio te envuelve y el tiempo pareciera detenerse; las lámparas, las paredes decoradas con cuadros y los espejos, transportan a cualquiera a un lugar vintage, que bien pudo haber sido sitio de inspiración de grandes intelectuales, escritores, pintores y filósofos.
“La idea de los sillones, el reloj y los cuadros la tome de la cafetería ‘París’, que está en Budapest, un lugar muy antiguo que destaca por su decoración, las mesas que son más modernas las saqué de lugares de aquí de Querétaro; quise fusionar los dos conceptos”, explica el fundador.
Un detalle que llama la atención es un viejo mapa de la capital queretana, que Santiago tomó de la casa de sus abuelos, además de una frase que dice: “Frente a una taza de café se piensa, se sueña, se escribe, se conversa, se enamora….” Todos los elementos fueron pensados para invitar al inicio de un nuevo día frente a una infaltable taza de café o la concepción de ideas burbujeantes, cual soda italiana, que por cierto, también está en el menú.
En un principio el proyecto se especializaba en la barra de café, pero los mismos clientes comenzaron a pedir comida, por lo que se sumaron paninis, ensaladas y algunos postres como muffins y brownies.
“Tome algunos cursos en la Ciudad de México y aquí en Querétaro, sobre todas las bebidas que se pueden hacer con café, pero a petición de los comensales, incluí paninis, como el clásico preparado con jamón de pavo y queso gouda, el vegetariano con queso de cabra, el de jamón serrano y el enfrijolado con chorizo y queso”, comentó Santiago, quien a la par de este negocio estudia Comercio y Negocios Internacionales.
Es un concepto joven que tiene poco más de de dos años
Se ubica en Madero #97, y brinda servicio de lunes a viernes dee 7:30 a 21:00 horas y los sábados de 13:00 a 21:00 horas
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