Esta misma semana la periodista Alma Guillermoprieto festeja 40 años de dedicarse al periodismo, su carrera comenzó con la revolución de Nicaragua, misma a la que hoy considera como una gran derrota, porque no se han logrado construir estructuras que sean más impermeables a la corrupción y a la ambición individual.
“Inicié en la reportaría en Nicaragua hace cuatro décadas, esta semana justamente estoy cumpliendo 40 años como reportera, y ahora, tiempo después de que vi triunfar a la revolución, diría que no está cambiando de una situación tan desesperante en Nicaragua. Las lecciones del pasado no las aprendió el régimen que empezó siendo revolucionario, me da tristeza ver que la revolución en Nicaragua no cambio”, expresó.
Y sobre los movimientos feministas e igualdad de género, dijo que las estructuras también son el gran problema. “Las estructuras de poder masculino pueden transformar una conquista en otra derrota más, en que haya una mayoría de reporteras jóvenes porque se les puede pagar menos, por ejemplo”.
La autora de La Habana en el espejo y Desde el país de nunca jamás, se presentó ayer en el Teatro de la Ciudad, en una conversación con Guillermo Osorno. Redacción
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