Suena el teléfono en la madrugada, Ariadna contesta. La noticia que le dan la hace temblar, nunca se lo hubiera imaginado: Damián, de quien está enamorada, atentó contra su vida. ¿Cómo fue? ¿Por qué fue? Las respuestas están en tres números: 666, puesta en escena que presenta Micro Teatro con la dirección de Marco Pelu Tamayo.
Ariadna (Rubí Cervantes), Damián (Jorge Leonel), Paloma (Kali Cano), Marcos (Alex Rocha), son amigos, aunque su amistad sea un tanto terrible. En una noche de fiesta, mientras Damián cae rendido, le tatúan el número “666” y lo hacen creer que es “El Anticristo”
Damián, explicó el actor y escritor Jorge Leonel, “es un personaje que es escritor de terror y ciencia ficción, sus amigos le hacen creer que es ‘El Anticristo’ y tiene la necesidad de salvar a todo mundo. Es un personaje que en cuanto lo leí dije: ¡quiero hacerlo! Porque me sentí muy identificado con él en varios aspectos, no en todos, pero sí en varios, además es un escritor de terror y ciencia ficción que también es el género que a mí me gusta, y muchos de sus conflictos son también míos”
Rubí Cervantes interpreta a Ariadna, “originaria de un pueblo muy chiquito que se viene a estudiar Filosofía y quiere aparentar algo que no es, ella está enamorada de Damián, pero su ex pareja es Marcos, y ahí hay un triángulo amoroso bastante extraño”.
Paloma, interpretada por Kali Cano “es una de la chica bastante perturbaba, con muchas manías y hace un papel que crea conflicto con los demás personajes”.
En voz de Alex Rocha, el personaje de Marcos “tiene muchos conflictos, al igual que los otros personajes, pero su principal conflicto es que es muy machista, hasta cierto momento se siente como el líder del grupo, aunque no lo es, pero trata de humillarlos a todos para esconder sus defectos, es un niño mimado, hasta cierto punto presumido, pero lo disimula sintiéndose superior, sobre todo con Ariadna que es su pareja, y es él quien inicia la broma para que Damián se crea ‘El Anticristo’”.
666 es una adaptación de la obra original de Mario Cantú titulada El Anticristo. En palabras de Pelu Tamayo, la puesta en escena está dirigida a adultos y adolescentes. “Porque, justamente, en la adolescencia es cuando nosotros estamos en un conflicto de personalidades, como los personajes, no sabemos quiénes queremos ser, no sabemos quiénes somos ni a dónde vamos, incluso algunos adultos tenemos más de 30 años y todavía no lo sabemos, pero estamos en esa batalla de tratar de descubrirlo”.
Ariadna, Damián, Paloma y Marcos, “han batallado mucho antes de y durante el conflicto de esta obra y, finalmente, eso nos lleva a una reflexión, la idea es que la gente salga del Micro Teatro pensando en uno mismo y en los estigmas que lo marcan a uno mismo, ¿y para qué? Para aceptarlos”, agregó Pelu.
Esta puesta en escena celebra su segunda temporada en Micro Teatro, ubicado en la calle Juárez, número 147, Centro Histórico. Micro Teatro es un lugar, un micro espacio, que sin ser propiamente un sitio teatral, sirve a la perfección como crear historias teatrales. Y la reducción de espacio permite una complicidad más íntima entre público y actores.
“Con la cercanía del público la energía se contagia inmediatamente, se vuelve una esfera de energía en el que el público y nosotros, hasta estar entrelazados. El hecho de estar tan cerca obliga a una naturalidad, y a la necesidad de ser mucho más contenidos”, agregó Jorge Leonel.
“Aquí, aunque no tienes contacto visual con ellos, te das cuenta de las reacciones o escuchas algunas expresiones que hacen también que se enriquezcan mucho tanto la obra o el personaje que estamos representando cada quien, es muy satisfactorio estar cerca del público”, manifestó Alex Rocha.
Las funciones de 666 son únicamente los días miércoles y es recomendable hacer reservaciones al número 441 1000 294 y en Facebook en el espacio de Micro Teatro.