El bullying o acoso escolar es el concepto de un fenómeno que ha existido desde siempre; sin embargo, México no ha logrado avanzar en su erradicación.
Niños obesos y bajos de estatura son los más propensos a ser agredidos, la violencia física o sicológica en las escuelas puede derivar en graves consecuencias. Francisco Castillo Alemán, miembro de la dirección general de Prevención del Delito de la Procuraduría General de la República (PGR), declaró que uno de cada seis jóvenes víctimas de bullying se suicida.
Según la especialista educativa, Liliana Aguilar Cruz, este conflicto es difícil pero no imposible de eliminar, pues es un tema que si no se corrige desde temprana edad repercute en el futuro.
La especialista reconoció que la ausencia de los padres por el trabajo ha incrementado el fenómeno debido a la falta de atención en los niños. Detalló que en el tiempo de ocio, los infantes se refugian en la televisión o videojuegos, que presentan actos de violencia; esta acción la replican con los más vulnerables en la escuela. De ahí la palabra en inglés “bull” que significa embestir o agredir.
La experta exhortó a los padres a una atención y comunicación con sus hijos, pues las consecuencias de este fenómeno son significativas para el crecimiento de un niño: baja autoestima, depresión, mentiras, violencia, reprobación escolar y deserción.
La experta informó que es necesario sanar con un reconocimiento amoroso, tanto al agresor como a la víctima, hacerle ver el valor de cada ser humano y, finalmente, escuchar los problemas que de fondo existen en el menor.
Liliana determinó que no se deben aplicar sanciones aunque sí medios de integración escolar y un proceso de socialización armónica en las escuelas.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) informó que México está en el primer lugar, a nivel internacional, en el número de casos de bullying en nivel secundaria.