Durante tres días, ocho horas de cada día, Fausto lijó un trozo de madera y en la alfombra de aserrín que se formó en el piso, escribió la frase de Eduardo Galeano: “¿Tenemos todo prohibido, salvo cruzarnos de brazos?”. La acción-instalación titulada “Nada nos quedó, sólo nuestros brazos” se realizó por primera vez en Brasil en 2016, y en Querétaro a principios de 2017, como un cuestionamiento al devastador futuro.
Fausto Gracia, quien es performer y artista visual, ayer inició un taller de Performance y Espacio Público en la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ); el objetivo es acercar a la gente a una práctica artística contemporánea que utiliza el cuerpo como su principal herramienta. “Y es que el cuerpo nos atañe a todos”, dice Gracia.
En el arte acción no se representa a un personaje, ni sigue un guión. El espacio y el cuerpo son ejes básicos y hay dos palabras claves: poética y política.
El taller se dividirá en dos partes, en la primera abordarán la teoría y referentes existentes del performance en México, América Latina y en el mundo.
Querétaro también tiene su propia historia. En el libro Arte-Acción y Performance en los muchos Méxicos, coordinado por Josefina Alcázar, Fausto Gracia participa hablando de las acciones realizadas.
El taller inició ayer, y tendrá actividad de 16:00 a 19:00 horas hasta el 13 de abril, en el Centro Cultural Hangar. El programa se realiza a través del Laboratorio de Arte y Nuevos Medios de la UAQ. La segunda parte del taller será desarrollar una serie de ejercicios y en el último día los participantes presentarán al público sus proyectos.